Dócil

Opinión:

"Dócil" es la tercera entrega de la serie protagonizada por el inspector Malart. Cada uno de los libros se lee de forma independiente, yo vengo a comentaros este último.

Da igual el crimen que sea, el protagonista principal siempre será la personalidad arrolladora de Milo Malart, engancha, deja huella. Cuarenta y tantos años un tipo interesante con buena forma física, le gusta nadar desnudo en la playa de la Barceloneta, haga frío o calor. Siempre es un enigma para el lector, atormentado por sus fantasmas que no logra olvidar, intuitivo, inteligente, torpe al trato social, huidizo, pero dispuesto a llegar a la verdad de un caso hasta las últimas consecuencias.

Este thriller nos adentrará, junto a su compañera la subdirectora Rebeca Mercader, en dos crímenes, uno actual y otro del pasado, ambos irán unidos por ciertos protagonistas. En medio tendremos un atentado terrorista, aunque en verdad lo que el autor desea narrarnos es el amor en todos sus aspectos. Pensamos en el amor de forma comercial con rosas y romance, pero Aro Sáinz De La Maza profundiza para mostrarnos los aspectos menos encantadores, porque también puede ser dolor, orgullo, hacer daño o simplemente utilizar a otra persona en su beneficio, aprovechándose de quién le ama. Usará ese noble sentimiento, o no tanto, para darle forma a cada personaje.

 ¿Qué puede sentir alguien cuando se da cuenta que cambió su forma de ser, su propia personalidad para nada?

Un sospechoso que esconde muchos secretos, el brutal y sangriento asesinato de toda una familia en su propia casa de forma anormal, salvaje. Infidelidades, sexo en la escena del crimen... ¿Quién es capaz de tener relaciones sexuales ante cuerpos muertos? clips, videos en Youtube, oscuros, perversos, agresivos, un escenario tal vez alterado.

Lo mejor son esos momentos en los que Malartse sienta en el suelo de la casa del crimen para intentar visualizar lo que ocurrió, es algo increíble, casi parece tener poderes sobrenaturales, nos hace ver, sentir, escuchar esas pisadas de un instante que ya no existe. Siempre buscando pistas mientras lucha con sus propios demonios interiores.

Los interrogatorios, qué decir, maravillosos se te ponen los pelos de punta ante sus preguntas, sus insinuaciones, vas leyendo como el sospechoso, Lucas Torres, simplemente calla y sonríe, esa maldita sonrisa en forma de burla que nunca parece irse de su boca.

Barcelona, una ciudad que se verá manchada de la sangre de demasiados inocentes. Mientras seguiremos las pistas para saber quién o quiénes fueron los asesinos de los miembros de esa familia, el autor aprovecha para dejarnos entre estas páginas una acerba crítica sobre los políticos y policías corruptos y los malos tratos. Casi quinientas páginas, no será hasta llegar a las últimas que sabremos la verdad, la forma de esconder, jugar con las pistas manteniendo la tensión, es de lo mejor que he leído narrado en años.

Ni novela nórdica negra, ni americana, tenemos una novela de un español que le da mil patadas a todos estos. Mi  puntuación más alta por bien escrita, personaje impecable y trama.

Violeta Lila