Un cadáver en Port du Bélon. Saga comisario Dupin 4

Opinión:

Reconozco que me gustan mucho las novelas protagonizadas por el comisario Dupin. Novelas que descubrí hace un par de años con "El misterio de Pont-Aven", unas historias que van mas allá de casos por resolver. Paradójicamente, estas novelas, que suceden en la Bretaña francesa, no están escritas por un autor francés, sino alemán. Pese a su nombre galo, Jean-Luc Bannalec es alemán. Pero, bueno, eso no es más que una anécdota y es un buen punto a su favor, porque sus historias son 100% francesas.

Como las anteriores, "Un cadáver en Port du Bélon" ha sido publicada en España por la editorial Grijalbo. El comisario Dupin, al mismo tiempo, tiene su propia serie de televisión con el título "Comisario Dupin: relaciones bretonas", la cual he podido ver y recomiendo, es un buen complemento a la lectura de las novelas.

La verdad, es que apenas hay puntos negativos que extraer de esta novela. Es cierto que, quizá comparada con otras novelas del género ( como las de Mankell por ejemplo) sean un poco mas flojas, pero tienen su miga y un toque de originalidad. Personalmente, es una serie de novelas que me agrada mucho, me lo paso muy bien leyéndolas. Jean-Luc Bannalec ha logrado crear un personaje, este comisario Dupin, que conecta con el lector desde el primer momento. Al mismo tiempo, la novela, y ocurre lo mismo con las anteriores, tiene una serie de características que la hacen peculiar. Estos puntos a favor son:

Unos toques de humor que no pasan desapercibidos al lector. Toques que ayudan a limar un poco el dramatismo de algunas escenas o situaciones. Son novelas que aportan una gran información sobre la Bretaña. No es una novela histórica, pero hay bastantes párrafos que la harían pasar como tal. Tanto en esta como en las otras, aprendes un montón de cosas sobre la zona de Bretaña, tanto a nivel de historia como de cultura y sociedad. En "Un cadáver en Port du Bélon" hay una gran información acerca del mundo Druida, los Celtas, la relación entre Bretaña y Escocia y el cultivo de las ostras. Éstas, sin ir más lejos, van a convertirse en piezas clave a la hora de resolver el caso. Quiero destacar todo lo que he aprendido sobre las ostras y sus variedades gracias a esta novela. Toda esta información que se da, no aparece como un pegote o da la sensación de estar de más, sino todo lo contrario: es una información clave para entender muchos de los interrogantes que se plantean relacionados con el caso, tanto para Dupin como para el lector. Lo cierto, es que da gusto leerlo. Lejos de cansar, es una auténtica gozada.

Otro aspecto que destaca, o que me ha llamado la atención en esta novela, son las notas gastronómicas que aparecen. Por medio de Dupin y el resto de los personajes conocemos la gastronomía bretona. Todos estos toques aportan gran calidad  a la novela. Es una novela policíaca y de intriga, pero no se ciñe a presentarnos un cadáver y un caso a resolver, sino que va mucho mas allá. Siguiendo la estela de la novela escandinava, hay un fondo social; en este caso se hace una crítica ecológica bastante interesante. Creo que estos apuntes, como digo, aportan calidad a la novela y permiten que lectores a quienes no les llame mucho la novela negra, la lean con ganas. Es mi caso por ejemplo, aunque leo novela policíaca, no acaba de gustarme tanto como otros géneros, pero novelas como las de Jean-Luc Bannalec consiguen que me convierta en una forofa del género.

Jean-Luc Bannalec tiene un estilo narrativo muy fresco y ágil. Desde un primer momento, logra darle a la trama mucha acción. En ningún momento de la lectura el lector se aburre, sino todo lo contrario. Consigue que éste no aparte la mirada de la lectura. En ello también tienen mucho que ver los personajes, tanto Dupin como el resto son personajes muy bien construidos. Esta novela es la cuarta de la serie protagonizada por este comisario; si has leído las anteriores, aprecias la evolución del personaje, ahora está mas integrado en la comunidad bretona, ya no añora tanto París. Me gusta la personalidad que le ha dado y la forma que tiene de trabajar, es un hombre que no se rinde.

"Un cadáver en Port du Bélon" es una buena novela que entretiene y hace pasar un buen rato al lector. Sólo por ello hay que leerla. Ahora, eso sí, no es una novela Landscape pero logra el mismo efecto que éstas: que te entren ganas de coger la maleta e irte a pasar una temporadita a la Bretaña y a Port du Bélon.

Ysabel M.