La cárcel

Opinión:

Estamos ante una novela negra donde nada es lo que parece. Nos adentramos en un reality show que simula una cárcel con cámaras que se supone llegan a todas partes, no perdiendo con ello los espectadores ningún detalle. Pero algo ha fallado, se cometieron unos asesinatos y el asesino burló las cámaras. El plan de la dirección del programa es que nadie se entere para que los patrocinadores no quiten su dinero. Una lucha entre saber la verdad y los intereses comerciales de lo que es un reality desalmado.

¿Es este un crimen perfecto? 

Verdades a medias, mentiras intentando mantener el secreto, todo vale por el vil metal, las vidas humanas pasan a un segundo plano. Una conspiración que no ayuda en nada a la policía que debe resolver los crímenes sin que su presencia se note. Una historia de suspense perfectamente estructurada que se mueve en diferentes escenarios. 

Un libro que por su ligereza en la lectura se lee de una sentada, entretiene, pero tiene mucho más que eso, aparte de cumplir su función de evasión, es una buena novela. Más allá de la investigación toca un tema moral. Estar más pendiente de las reacciones de fuera que del verdadero problema, y lo mejor de todo, no nos sorprende este hecho por frío que sea, sabremos que podría ser real. 

Un programa de televisión visto desde detrás de las cámaras. Personajes con una gran personalidad definida moviéndose en una buena ambientación, pero Alicia G. García hizo de la acción su protagonista principal. Sabe atrapar desde las primeras páginas intercalando dos historias que a simple vista no parecen tener nada en común, comprobaremos lo equivocados que estábamos. Manipular al público, los guionistas tienen el poder de hacerlo, y es que para seguir en el trabajo debes callar, mirar hacia el otro lado. Aunque la historia se vivirá en el presente, la autora recurrirá en varios momentos al pasado conociendo mejor así al personaje. 

Sabe mantener la incertidumbre sin apenas descripciones, directa al asunto, eso sí, con muy buenos giros haciendo con eso partícipe también al lector que empieza a hilar sus propias hipótesis. No es un ojo que lo mira todo, es una novela que juega con la intriga y el misterio. Se mantiene bien el pulso narrativo, ayudando unos buenos guiones bastante creíbles. Lo que será la investigación policial es buena, aunque choca que unos policías, ante dos muertes, sigan el juego del programa de hacer ver que no pasa nada. Un final sorprendente remata este libro original y bien escrito de una escritora que empieza y estoy segura dará mucho que hablar. 

Le doy buena puntuación por original y bien trabajado. 

Violeta Lila.