El matemago

Opinión:

Podemos acercarnos por curiosidad a este libro para ver de qué trata. Sin embargo, lo verdaderamente emocionante e interesante se encuentra una vez que te sumerges en sus páginas.

Gracias a este profesor de escuela veraniega, a nuestro protagonista y otros alumnos, la autora consigue mostrar que esas odiosas matemáticas que nos enseñan en el cole son algo más que teorías, teoremas y estudios que los antiguos se han sacado de la manga para achicharrarnos la cabeza a los alumnos de hoy en día.

De una manera sencilla y con ejemplos claros de situaciones reales, cada uno de los 26 capítulos está dedicado a un tema matemático, aunque a veces, algunos, están relacionados entre sí. Cada uno de los capítulos finaliza con una especie de reto que el lector puede intentar para ver si ha comprendido el concepto y la explicación de este inigualable profesor. Sin embargo, no debemos llevarnos las manos a la cabeza si no conseguimos resolverlo porque las soluciones a todos ellos vienen al final del libro.

De forma amena y divertida veremos como se aplican a la vida real los ciclos de Euler y de Hamilton, de dónde salió el sistema cartesiano, cómo calcular tarifas telefónicas ventajosas (esto tal vez enganche a más de uno), jugar a los barcos y ver que si un juego es verdaderaremente de azar las matemáticas no sirven para nada.

Estamos ante un libro divertido, ameno y que sirve para abrinos los ojos a un mundo que es mucho menos complicado de lo que parece. Además es un libro que no sólo aprovecharán los jóvenes estudiantes, sino que también podrán disfrutar los adultos que les guste acercarse sin miedo a la magia de las matemáticas.

Además cada capítulo está acompañado de una ilustración en color o gráficos, pues la mente también tiene que distraerse de vez en cuando de la lectura, y los jóvenes seguro que lo agradecerán.

Mila L. Castelo