Tú hoy no te casas

Opinión:

Da gusto cuando cae en tus manos justo el tipo de lectura que, sabiéndolo o no, tu cuerpo necesitaba. "Tú hoy no te casas" ha sido una lectura que he disfrutado muchísimo y que me ha redescubierto el gusto por leer comedias románticas (bien escritas, de las otras hace tiempo que me harté y, entre nosotros, saturaron tanto las estanterías de romántica que llegué a cogerles repelús). Y es que esta novela es una muy buena historia romántica que te atrapa desde las primeras páginas.

Para comenzar, la historia es muy atractiva por cuanto de exótico y casi "maravilloso" tiene su argumento: dos jóvenes muy conocidas, de familias millonarias, deciden escapar de cuanto se supone que deben hacer y desaparecer un tiempo en un precioso rincón de Costa Rica. ¿El objetivo? Que Coco aclare sus ideas y vuelva a tener fuerzas para actuar por su cuenta escapando del yugo que su madre colocó en su cuello hace demasiado tiempo. Sin embargo, el que se suponía un retiro tranquilo se convertirá, de la mano de todas las personas que van conociendo, en una auténtica aventura llena de misterio, tensión y mucho amor.

Y este es uno de los puntos fuertes de María José Vela y su novela: la galería de personajes. Están tan bien perfilados, son coherentes y consecuentes con cuanto se nos va mostrando de ellos y de su historia, que la sensación que transmiten al lector es que son seres humanos de carne y hueso, con sus fallos, sus miedos y sus fortalezas, pero todos ellos individuos únicos. Especialmente disfrutables son el inolvidable Chimuelo y, cómo no, la pareja protagonista, pero hasta en secundarios como el novio plantado Jaime o la extrema Loreto, aportan colorido y diversidad al plantel principal. ¡Y qué decir del perrete, Max! Como amante de los animales en general y loca de los perros en particular, confieso que me ha chiflado la manera en que aparecen los "pensamientos-ladridos traducidos" de Max cuando el cachorro aparece en escena. María José se maneja muy bien para que este chuchillo se convierta en un robaplanos encantador sin entorpecer la lectura.

Por otro lado, como decía, la historia es compleja. Tiene mucho de historia romántica, pero también de comedia de enredo, de novela de misterio e incluso policíaca en ciertos momentos y la autora maneja muy bien los distintos géneros que fusiona.

El resultado es una novela muy agradable de leer, tierna, divertida, bonita, radical cuando es necesario y, sobre todo, adictiva. He disfrutado muchísimo de esta mezcla de géneros y de cómo  la autora sabe aliñar su trama principal con otras secundarias que añaden profundidad psicológica a los personajes y configuran un microcosmos que parece tener vida propia.

Finalmente, me queda señalar que esta novela es la primera que leo de la autora (y no será la última) y felicito a Versátil por haber confiado en ella y publicado esta deliciosa historia.

¡Pura vida!

Ana Vanesa Cremades