Poeta en Nueva York

Opinión:

El libro que nos presenta la editorial Navona es singular. En un momento en el que la mayoría de las editoriales luchan por ofrecer, por sobresaturar, a veces en exceso, sus libros de información e ilustraciones, esta edición es simple y llanamente el poemario de Federico García Lorca, con una escueta introducción contextual y un breve epílogo que nos da algunas ideas de la influencia del poemario tras su publicación en otros autores que se consagrarían posteriormente. No hay notas al pie. ¿Es eso bueno?

"Poeta en Nueva York" no es la obra que recomendaría a alguien que quiera leer algo por primera vez de Federico García Lorca. Como se aclara al final del libro, el poemario lo escribió durante su estancia en la Universidad de Columbia, pero su publicación fue póstuma. García Lorca nunca estuvo del todo a gusto con la composición general de los poemas, reescribiéndolos numerosas veces ya en España durante el primer lustro de los años 1930. Tras su asesinato al inicio de la Guerra Civil, un amigo huye con el manuscrito al extranjero, siendo publicado en 1940 en México y Estados Unidos. 

Su estilo depurado, el gusto exquisito por la sonoridad, las aliteraciones y la metonomía, unido a un expresionismo vanguardista, hacen de este poemario ágil de leer y difícil de comprender. Influido por las técnicas de escritura automática que popularizaron los poetas franceses, muchos poemas son destellos de ideas unidas de manera surrealista. El impacto que produce su lectura no es tanto intelectual como estética. La relectura de los poemas nos arroja hacia un sentimiento de angustia, odio, asco y rebelión contra la sociedad norteamericana. Se hace patente la repulsa del poeta granadino hacia el mundo industrial, hacia el capitalismo, el urbanismo y la explotación de la clase obrera. 

Tema aparte es la denuncia que se hace de la situación de los negros. Vistos como víctimas de un mundo que no les pertenece, memorables son los pasajes que se describen de las poblaciones a las afueras de las ciudades, donde conservaban ritos, bailes y tradiciones atávicas, siendo el nexo de unión entre dos mundos totalmente distintos.

"Poeta en Nueva York" es uno de los poemarios más importantes de la Historia, no solo desde el punto estético y literario, sino por haber ejercido una influencia absoluta en muchos poetas posteriores, siendo un además el retrato de una época que nos habla de nuestro presente. Tal vez su lectura nos ayude a comprender un poco mejor por qué estamos como estamos. 

Antonio Sanz Egea