Mil mares de distancia

Opinión:

La edición de un libro dice mucho de él. Me gustan las portadas que Ediciones B trabaja, y "Mil mares de distancia" tiene una de esas portadas que evocan a otros tiempos pasados, una portada que con sólo verla ya da ese gusanillo lector que te pide leer la historia que se esconde detrás.

En "Mil mares de distancia" encontramos dos líneas temporales las cuales el autor va desarrollando durante toda la novela. En la principal, la del presente de 1898, conoceremos al matrimonio compuesto por Elisa y Zoilo, quienes se ven obligados a prácticamente huir de Cartagena, acuciados por las revueltas perpetradas por los trabajadores de la mina de la que Zoilo es dueño. El matrimonio embarca rumbo a México con la idea de quedarse en aquellas tierras el tiempo necesario mientras duren las revueltas. En el transcurso del viaje en barco, Zoilo desaparece misteriosamente y Elisa se queda sola en una aventura que la llevará a tierras mexicanas. La segunda línea temporal es muy importante para comprender muchas cosas de las que suceden en la actualidad. Esta línea nos lleva a unos dieciocho años atrás, donde conoceremos a un joven y humilde Zoilo. Veremos de qué manera prospera en la vida para llegar al punto de ser el acaudalado dueño de una mina.

La narración me ha resultado una historia muy entretenida. En cada capítulo sucede algo interesante, todo el tiempo están pasando cosas a los protagonistas, algunas muy peligrosas y el ritmo de la historia no decae en ningún momento. Al contrario, hay capítulos de verdadera intriga. El primer misterio es ¿dónde está Zoilo? ¿cómo puede desaparecer un hombre en un barco en medio del océano? A partir de aquí, muchos más misterios rodearán a la protagonista indiscutible, Elisa.

El autor, Nacho Sánchez Carrasco ha destacado en el personaje de Elisa, la fuerza como mujer. Su historia, de ser una mujer acaudalada, con todas las comodidades al alcance de su mano y teniendo una seguridad sobre su vida, se ve obligada a seguir a su marido, llevándola a México, una tierra con gentes y costumbres muy distintas a las españolas. Si huyeron de España por los peligros que veían venir, allí en México le depararán más peligros si cabe.

La narración es ágil, no cayendo en exageradas descripciones, y como ya digo, no da tiempo de aburrirse, ya que en cada capítulo ocurre algo nuevo que le da más salsa a la historia.

A pesar de esto, no he conseguido conectar del todo con Elisa, la protagonista. Me ha exasperado en algunas ocasiones, o quizá no haya tenido en cuenta la mentalidad de una mujer del siglo XIX, pero me hubiera gustado que Elisa tuviera más garra y ver cómo en esos primeros días en México revuelve cielo y tierra para saber qué ha pasado con su marido. Y eso no lo he visto, pero ya digo que quizá sea sólo mi impresión.

Como ya he dicho, la historia está llena de misterios. En este aspecto, considero que hay pequeños puntos sin aclarar, o que para mi gusto no han quedado del todo claros. Esto no le resta poder a la historia, no quedan cabos abiertos que dejen mal gusto, pero me hubiera gustado que detallara con más precisión qué pasó con algún que otro personaje.

Nacho Sánchez Carrasco ha ambientado de forma impecable la historia, desde la manera de hablar, los paisajes e incluso la moda, tanto en España como en México.

Para esto, el autor se ha documentado ampliamente, y lo muestra al final del libro. Nacho Sánchez Carrasco ha consultado más de una treintena de libros relacionados con la época, tanto en el terreno minero, bancario, político, o económico. Con esto, ha conseguido ser lo más fidedigno posible con la historia, ambientándola en un entorno completamente creíble.

En resumen, "Mil mares de distancia" me ha parecido un libro muy entretenido, en la que poquito a poco vamos resolviendo un misterio que se va cociendo a fuego lento. Un libro en el que en cada capítulo pasan cosas con las que el lector va a querer saber más y más.

María Criado.