Los seres agónicos. Criaturas marginales y monstruos contemporáneos

Opinión:

Interesante colección de ensayos la que nos ofrece Manuel Gregorio González en su libro "Los seres agónicos".

La obra se estructura en tres partes dedicadas a  tres motivos esenciales que han acompañado a la cultura europea y occidental a lo largo de los últimos siglos: el crecimiento de la ciudad, el desarrollo de la ciencia y el misterio que el mundo oriental representa para los occidentales.

La primera parte gira en torno a la ciencia y en ella el autor aborda las figuras de Frankenstein y Nemo. La sección dedicada a la ciudad explora los mitos de Jack el Destripador y Drácula. Por último, las figuras de Mata-Hari y Lawrence de Arabia ilustran el tema de la fascinación que despierta el mundo oriental en el occidental.

Como se puede ver, el autor utiliza tres figuras literarias y tres personajes reales; todos ellos aún presentes, en mayor o menor grado, en nuestra cultura. Cada ensayo va acompañado de imágenes que ilustran visualmente el personaje analizado.

En mi opinión, los ensayos más logrados son los dedicados a Frankenstein, Drácula y Jack el Destripador. El autor nos ofrece una mirada diferente sobre ellos francamente interesante que te obliga a replantearte la opinión que tenías forjada sobre estos personajes y, por supuesto, a entender las razones por las que nos siguen fascinando.

Me ha gustado especialmente que al tratar la figura de Jack el Destripador el autor haya evitado, en la medida de lo posible, especular sobre la posible identidad del famoso asesino en serie y se haya centrado en las implicaciones psicológicas y sociológicas que su figura lleva asociadas.

Con respecto al ensayo dedicado al Capitán Nemo no me considero capacitada para opinar. Desconozco la obra de Julio Verne (lo sé, es algo imperdonable pero no he leído ninguna de sus obras) lo que sí puedo decir es que sus argumentaciones resultan convincentes y se nota que el autor conoce bien el tema.

La figura de Lawrence de Arabia (¿alguien puede evitar imaginarlo con los rasgos de Peter O'Toole?) es demasiado compleja para el espacio que le dedica el autor, sólo veinte páginas. Cualquiera que haya leído su fascinante autobiografía, "Los siete pilares de la sabiduría", esperaría un análisis más profundo; sin embargo, el autor sintetiza sus argumentos muy bien y nos ofrece una interesante visión del personaje aunque, personalmente, me hubiera gustado que le dedicase más espacio.

Las reflexiones del autor sobre Mata-Hari resultan interesantes y creo que el autor ha resuelto bien el reto que supone enfrentarse a la figura de una mujer ambiciosa, calculadora y sin escrúpulos que basó toda su vida en mentiras para obtener sus objetivos.

Todos estos personajes tienen en común que representan el temor, el miedo ante lo desconocido, de una sociedad, un mundo, que ve como sus valores van desapareciendo siendo sustituidos por otros nuevos; simbolizan la muerte de un mundo y, a la vez, el nacimiento de un nuevo orden de cosas.

"Los seres agónicos" son un conjunto de ensayos bien argumentados y muy interesantes que nos ofrecen una visión lúcida y diferente sobre una serie de personajes que nos han acompañado a lo largo de nuestras vidas, y nos ayudan a entender la fascinación que aún ejercen sobre nosotros. 

Jaci Alía Arreche