Una vida maravillosa

Opinión:

Emily Henry vuelve a cautivar a sus lectores con "Una vida maravillosa", una novela repleta de emoción que atrapa desde la primera página. Ha sido publicada por Titania.

En ella nos presenta a Alice Scott, una escritora entusiasta y cercana que persigue su gran oportunidad. Siguiendo una pista, cree haber encontrado a Margaret Ives, la trágica heredera, antigua princesa de la prensa rosa e hija de una de las familias más célebres -y escandalosas- del siglo XX. Contar su verdadera historia podría ser la oportunidad de su vida.

En el camino aparece Hayden Anderson, un escritor consagrado y ganador del Pulitzer, que se convierte en su mayor rival. 

Margaret pondrá a prueba a los dos candidatos; durante un mes, en entrevistas privadas, deberán demostrar quién merece escribir su biografía. El problema surge cuando Margaret ofrece dos versiones diferentes de su vida: con Alice se muestra abierta y vulnerable, mientras que con Hayden se mantiene distante y evasiva. ¿La razón? Tendréis que leer la novela para descubrirlo.

Ambos escritores firman acuerdos de confidencialidad que les impiden hablar del tema, aunque se crucen constantemente en la isla, un lugar pequeño y con pocas distracciones. Con el paso del tiempo, su relación va evolucionando, la rivalidad inicial da paso a una cercanía que despierta sentimientos profundos en ambos. Pero, ¿qué pasará entre ellos cuando solo uno consiga el trabajo?

La trama incluye una historia dentro de la historia principal, un recurso que mantiene al lector en vilo. Por un lado, está la fascinante historia del pasado de Margaret. Por otro, el presente de los dos escritores: su acercamiento, los momentos de evasión fuera del trabajo y ese lento proceso de conocerse que va transformando sus perspectivas de futuro.

La novela comienza con un ritmo pausado, centrado en presentar a los personajes y su entorno. A medida que avanza, la interacción entre Alice y Hayden dinamiza la lectura; su rivalidad, las entrevistas con Margaret y los momentos de cercanía hacen que la historia resulte más ágil y entretenida. Hacia el final, la tensión se intensifica. Aunque el desenlace puede verse venir -como me pasó a mí-, eso no resta valor a la historia; al contrario, refuerza la sensación de que no podría haber terminado de otra manera.

Temas como el peso de la fama, los sacrificios personales, el duelo, los secretos y la complejidad de las relaciones familiares están presentes, dándole mayor profundidad a la novela.

En definitiva, "Una vida maravillosa" es una lectura que atrapa y deja buenas sensaciones, por lo que no dudo en recomendarla.

Emily Henry no decepciona.

Mónica CZ