Un acorde menor

Opinión:

"Un acorde menor" es la segunda novela de Carolina Casado.

En ella nos presenta a Becca, una chica de 17 años, que, tras la muerte de su padre, no ha vuelto a ser la misma. Siente tanta tristeza y dolor, que la única manera que tiene de aliviarse, es autolesionándose. Tras su último intento de suicidio, su madre decide internarla en un centro de salud mental especializado en el tratamiento de adolescentes. Allí conocerá a Anna, su compañera de cuarto, una chica locuaz y extrovertida, que vive dominada por sus miedos; a Elizabeth, que se esconde tras ropa ancha y a la que no le gusta llamar la atención; a Gus, un chico dominado por comportamientos obsesivos e inflexibles que no le dan tregua; y a Alec, un joven de mirada profunda que llamará poderosamente la atención de Becca, y que esconde mucho dolor tras su arrolladora personalidad. Juntos, y con la ayuda de la psicóloga Martha, serán capaces de enfrentarse a sus miedos y de luchar por recuperar la normalidad de sus vidas.

La trama gira en torno a Becca y a su estancia en el psiquiátrico, donde veremos una clara evolución de su persona a medida que avanza la terapia.

La amistad que surge entre el grupo de pacientes, será una de las cosas más bonitas del libro, y veremos la importancia de la compañía y del apoyo de personas cercanas en el proceso de recuperación.

Al estar narrado en primera persona por Becca, empatizaremos con su personaje de inmediato; y sentiremos el malestar que le causan las voces que oye en su cabeza; voces que la hunden y la menosprecian continuamente. Viviremos en primera persona su infierno, pero también su camino hacia la recuperación.

Algo que no ha terminado de convencerme es el cambio tan rápido en la mentalidad de los chicos, aceptando la ayuda que les ofrecen los psicólogos sin poner apenas pegas. Es cierto que hay pacientes muy colaboradores, pero hay otros muchos que pasan por recaídas o que niegan tener algún problema; y los jóvenes en especial, suelen ser más reacios a aceptar ayuda. Supongo que, al ser una novela de ficción, y para hacer más amena la historia, ese proceso no ha llevado tanto tiempo. Aun así, la evolución en la recuperación de todos ellos, es bastante realista.

El ritmo es muy bueno, y la narración tan fluida y directa de la autora, hace que te metas de lleno en la historia.

Al final, encontraremos unas ilustraciones realizadas por Nacor Fernández, en blanco y negro, de Becca, Alec, Elizabeth, Gus y Anna.

Estamos ante una novela donde se abordan los trastornos mentales de una manera realista y cercana, y donde cobra especial importancia la aceptación, el perdón, la valentía y las ganas de luchar.

En resumen, "Un acorde menor" es una lectura dura, intensa y emotiva; una historia de superación donde la amistad verdadera tiene un papel protagonista.

Muy recomendable.

Mónica CZ