Vegetarianos concienciados

Opinión:

En este libro, Lucía Martínez ofrece una gran cantidad de información, que podrá aprovechar todo tipo de público, desde quienes quieran iniciarse en la alimentación vegetariana hasta quienes ya hace años que la practican.

Personalmente, opto por utilizar en la reseña la palabra "vegetariano" porque me parece un término genérico más cercano a todas las personas; aunque la autora dentro del libro escoge "vegano" por su precisión en cuanto al patrón dietético.

La cuestión es que hay varias descripciones aplicables en función de qué alimentos incluyen en su dieta: flexiterianos, ovolactovegetarianos, lactovegetarianos, ovovegetarianos, vegetarianos estrictos, veganos. Y eso sin entrar en otras opciones compuestas de alimentos crudos o de solo frutas.

En la presentación del libro se utiliza el color naranja, que en sintonía con la portada podríamos ver como calabaza, para resaltar conceptos y llamar la atención sobre algunos aspectos. Con esa maquetación se consigue que el libro resulte mucho más atractivo.

Si por una parte es un libro para ser leído por completo, paso a paso; por otra, tras esa primera lectura, cambia su función a libro de consulta, pues contiene mucha información práctica, que será de mucha utilidad de ahí en adelante. Entonces, con un repaso al índice será cosa de un momento dirigirse con facilidad al capítulo apropiado.

Primero se refiere a los lugares donde se come, de manera más o menos habitual: en casa, en el trabajo, salidas de ocio, y en los viajes. Luego entra en otros temas, como sería la atención en los servicios de salud, si el hecho de ser vegetariano es más caro que otras opciones alimenticias, la cuestión de enfocar los temas que surgen sobre los adolescentes vegetarianos, y sigue con la divulgación en las redes sociales, que es una forma de llegar a un público amplio.

Repartidos por el libro hay diferentes opciones de menús vegetarianos y también en los dos apéndices situados al final, donde están desarrollados con mucho más detalle. También, para quien quiera hacerlo por sí mismo, hay algunas recetas para elaborar hummus, hamburguesas y bolitas energéticas; todo claro y sencillo de realizar.

Otro aspecto importante del libro son las advertencias que hace Lucía Martínez sobre la comida ultraprocesada, sobre la que considera que, por más que sus ingredientes originales sean todos vegetales, con esa elaboración ya no se pueden calificar como alimentos saludables, aunque las etiquetas y la publicidad hagan lo afirmen de todas las formas posibles.

Tal como me ha parecido, "Vegetarianos concienciados" es un estupendo manual con unos contenidos muy interesantes, además de que puede ser guía para muchas personas, sean o no vegetarianos, porque sus propuestas alimenticias son muy razonables y su aplicación redundará en beneficio de todos los lectores.

Selin