Miradas de humo: La detective

Opinión:

"Miradas de humo: La detective" es una novela repleta de acción e intriga moviéndose en lo paranormal. Los asesinatos en serie estarán relacionados con una obra del Museo del Prado y un trasfondo religioso. Las palabras logran sumergirnos hasta el rincón más profundo de los pasillos del museo: ¿Qué es ese humo siniestro que aparece en uno de los cuadros?

Víctimas asesinadas en los jardines del Prado, cuyos cuerpos exhiben un mensaje de las manos que les quitaron la vida, desconcertando a los investigadores. La escritora Pilar González no sólo llama la atención del lector en la trama argumental, sino que también lo hace con el personaje de Julia Soler, una protagonista empoderada y fuerte dispuesta a descubrir quién está detrás de esta serie de crímenes, y cuya primera víctima resulta ser una amiga suya. Para ello, no le quedará más remedio que colaborar con el inspector de policía Diego Jiménez, con el que desde el principio mantiene una tensa relación profesional.

Dos magníficos protagonistas cuyo desarrollo personal se halla muy trabajado. Seguiremos la introspección de cada protagonista, sus luchas, su historia... Ambos están perfectamente definidos. Él está divorciado y ella arrastra un pasado doloroso en un internado de monjas; ahora se verán involucrados en un tema de fanatismo religioso que la propia autora maneja con delicadeza. Aparte de estremecernos con unos extraños crímenes, nos llevará a otros instantes de los dos investigadores, de las víctimas y de los propios asesinos, logrando que esos pantallazos del pasado al presente generen una narrativa más intensa, no decayendo en ningún momento, moviéndose entre Madrid y Sevilla, dos ciudades que la autora debe conocer perfectamente por las tremendas descripciones narradas, en las que destaca las de varias iglesias sevillanas. En ambos casos, Pilar documenta con detalle el desarrollo de los pasos de la investigación, ofreciendo aún mayor veracidad a los hechos. Por si esto os pareciera poco, también trasladará al lector ciertos mensajes sociales y culturales.

Con un estilo ágil, el lector se sumerge en esta novela negra repleta de emociones intensas y en la que no falta tampoco un pequeño toque de misterio y magia que se fusiona a la perfección con la historia, formando una combinación perfecta. 

Un thriller policiaco con todas las piezas en su sitio... con todos sus enigmas por descubrir, y cuyos hilos han de ser tirados con sumo cuidado sin perder detalle alguno en su metódica construcción. Maravillosamente estructurado, se enreda hasta tales extremos que tendremos dudas de si lograremos ver algún desenlace satisfactorio. Porque viviremos una auténtica lucha contra el tiempo para intentar evitar que se sigan cometiendo más asesinatos. En ese torbellino de emociones, nos preguntaremos qué es lo que va a suceder en las siguientes páginas y quién está detrás de estas muertes.

Mucha adrenalina en una trama cargada de crímenes y una lucha denodada por esclarecerlos, donde los efectos preternaturales sumarán consistencia, dándole un mayor peso específico a la narración, envolviéndolo todo un desarrollo sencillo pero muy sobrecogedor que deja al lector atornillado leyendo, y un final de esos que impactan y perduran varios días en la mente.

Le pongo puntuación alta.

Violeta Lila