Pelazo para chicas con prisas

Opinión:

A ver, este libro es como todo. Para quien sea un profesional de la peluquería lo encontrará muy básico, pero para los patosos o los que no tienen ni idea, como es mi caso, la verdad es que es un libro muy práctico y útil. Forma parte de una colección que ha sacado Zenith con un nombre muy sugerente: "Para chicas con prisas" allí tienes una amplia variedad de títulos que van desde consejos para maquillarte hasta estar en forma, pasando por los de viajar o la comida sana. El título que vamos a reseñar es "Pelazo para chicas con prisas", lo ha escrito Marichu del Amo y ha contado con las ilustraciones de Georgina Gerónimo.

Es un libro que también pretende abrir los ojos ante muchos mitos en torno al cuidado del cabello. Para empezar, dejan bien claro que el pelo no puede regenerarse ni recuperarse, simplemente porque es tejido muerto. Aun así, no está de más tener y seguir una serie de pautas para lograr un cabello sano. Entre los mitos que echan por tierra está el de que si te cortas las puntas, el pelo te crece más y más rápido, que es bueno usar agua fría en el último aclarado, que el aceite de coco es milagroso, que lavarse el pelo todos los días es malo, etc. Con algunos de ellos estoy de acuerdo, pero no con la defensa que hacen del uso de parabenos, siliconas y sulfatos en la elaboración de champús; cada día se está procurando reducirlos y son muchos los productos capilares que ya se elaboran sin estos productos químicos.

Otro de los puntos que destaco en él son los consejos que da. Los he encontrado muy útiles, además están pensados para quienes no nos manejamos muy bien con las planchas, secadores y moldeadores. Las explicaciones están esquematizadas y las ilustraciones de Georgina Gerónimo ayudan a entender mejor cada paso. No se olvida la autora de dar consejos sobre cómo hacerte un peinado rápido o del tipo de corte que más te favorece según sean tus rasgos.

El libro pretende, básicamente, ser una guía, no pretende nada más, de ahí su sencillez. Cumple lo que promete así que no tengo nada que objetarle.

Ysabel M.