Midori, la cenicienta del hospital, volumen 3

Opinión:

"Midori, la cenicienta del hospital, volumen 3" es la tercera entrega de este manga, de género shojo, que está centrado en la profesión farmacéutica en general y en Midori Aoi en particular, quien trabaja en el departamento de farmacia del hospital Yorozu, donde lleva ya dos años, según se nos indica al final de este volumen.

Además de esta versión manga, también hay una versión televisiva en Japón, un dorama que todavía no nos ha llegado, como otras series que pueden visionarse, aunque sea con subtítulos.

Midori es la protagonista principal, por lo que está en el centro de las historias y tiene presencia en la mayoría de escenas, aunque también habrá momentos en que se mantendrá un tanto al margen, sobre todo en este volumen, que trata temas complicados como son la actitud general, de pacientes y sanitarios, ante la gripe y las vacunas primero, y con el cáncer después.

Así, el primer capítulo de este volumen está dedicado a la gripe, que por simple que sea puede tener complicaciones, sobre todo en personas de avanzada edad. Uno de los detalles que destaca es que la vacuna no evita el contagio, sólo puede aminorar los síntomas, de manera que el proceso gripal resulte menos gravoso. Otro aspecto es la comunicación, sobre la que plantea que el sanitario debería ser más comprensivo con las circunstancias personales del paciente.

Los demás capítulos siguen un caso de cáncer, donde además de mencionar los tratamientos y su aplicación, incide en cómo afecta a una familia que uno de sus miembros lo esté padeciendo, sobre todo si se trata de un caso bastante avanzado, lo que se denomina fase cuatro, que es cuando hay metástasis y sólo queda recurrir a tratamientos paliativos, que disminuyan el dolor y minimicen los síntomas.

En ese aspecto familiar, destaca que los demás miembros también pueden sufrir el síndrome del segundo paciente (en el desarrollo de la trama) o del paciente sano (título del capítulo 3), que igualmente necesitará un tratamiento, no sólo psicológico, sino que muchas veces también será físico, pues su salud tendrá una importante alteración.

Aun teniendo en cuenta que el sistema sanitario japonés es diferente al español, algo que recalco en cada reseña, este manga resulta muy instructivo, pues fácilmente se puede extrapolar su desarrollo a lo que ocurre en los hospitales de aquí, aunque las funciones de la farmacia hospitalaria sean menores y parte de lo aquí explicado se lleve directamente desde la zona de hospitalización.

Eso sí, como la supervisión de las actuaciones médicas, incluyendo medicamentos, dosis y tratamientos, está a cargo de Hiromitsu Tomino, quien aparece en la portada como consejero médico y en los créditos como supervisor, hay la garantía de que todo lo relacionado con esos aspectos se ajusta correctamente a los protocolos existentes en Japón.

"Midori, la cenicienta del hospital, volumen 3" ha resultado muy interesante, tanto por las historias humanas, con unos dramas muy reales y bien tratados, como por el contenido técnico, con una lectura muy gratificante, que me ha dejado con muchas ganas, como siempre, de la próxima entrega.

Selin