Mi mamá es una pirata. Un libro para convivir con el cáncer

Opinión:

Si tuviera que hacer un símil, "Mi mamá es una pirata" es a la literatura infantil lo que "La vida es bella" es para el cine (preciosa -aunque triste- película dirigida por Roberto Benigni). ¿Cómo evitas que tus peques sufran con las enfermedades en casa y respeten esos momentos en que el enfermo o la enferma necesita descansar y estar solo/a, respetar sus silencios y aguantar sus ausencias sin rechistar?

Aquí es mamá la que le cuenta a su peque aventuras de su trabajo. Le habla del barco, del capitán, de los viajes, de noches de tormenta y marea tan fuertes que necesita tres días para recuperarse… También le cuenta que como buena pirata tiene una cicatriz, y se la muestra orgullosa.

El pequeño escucha fascinado sus historias, las anécdotas (en las ilustraciones, por ejemplo, aparece una oscura noche tormentosa en la que el barco lidia contra las olas, los relámpagos y un enorme cangrejo, mientras ella solo le comenta que ese fue el día en que se ganó su cicatriz), y así pasan los días con la complicidad de papá, que se encarga de cocinar. Pero en ningún momento, aunque el niño vea que su mamá está físicamente agotada, sufrirá dolor, porque él ve cada día a una auténtica heroína.

Este cuento me ha puesto la carne de gallina, es precioso y muy, muy emocionante. No me esperaba en absoluto que pudiera causarme esas sensaciones.

Puedes ver detalles en el vídeo Especial Navidad donde sale mientras lo comento https://youtu.be/vkcX4PB7fmo.

Súper, súper, súper recomendadísimo.

Anika Lillo