Las homicidas

Opinión:

Alia Trabuccio Zerán es una de las voces literarias que más fuerza están tomando en Chile. En 2015 publicó su primera novela titulada "La resta", que tuvo una excelente acogida tanto por parte del público como de la crítica. En 2019, publicó en Chile este ensayo que ahora ofrece en España la editorial Lumen: "Las homicidas". Ensayo que no deja indiferente al lector y en el que da a conocer la historia de un grupo de mujeres asesinas que conmocionaron a la sociedad chilena del siglo pasado.

Corina Rojas, Rosa Faúndez, María Carolina Geel y María Teresa Alfaro son estas mujeres. Cuando cometieron sus crímenes no solo fueron juzgadas como asesinas, también como mujeres. Para la sociedad chilena del momento, que una mujer matase significaba algo, una cuestión que no se planteaba en un hombre. Las mujeres asesinas eran consideradas también anormales y se les juzgaba con mayor intensidad.

No le ha resultado fácil a Alia Trabucco Zerán recopilar la información necesaria para escribir este libro. El manuscrito tuvo que pasar por un tribunal que censuró varios párrafos. Pero lejos de desanimarla, todas estas dificultades animaron a la autora a seguir y dar a conocer la historia de estas mujeres. Hay un trasfondo feminista en su ensayo que no encuentro negativo, todo lo contrario, me parece lógico y oportuno. La autora pretende dar visibilidad a estas mujeres, hoy casi olvidadas en Chile, no por morbo, sino por justicia. Ella considera que fueron juzgadas y condenadas más por el hecho de matar, por ser mujeres, a ellas la sociedad les condenaba con más rabia porque eran incapaces de creer que una mujer pudiese matar, que si lo hacía era porque no era normal, se les consideraba anormales. Alia Trabucco Zerán tuvo que enfrentarse a la incredulidad de mucha gente que no entendía por qué quería recopilar esta información y escribir un libro sobre ello, veían un poco raro que le interesase saber más y dar a conocer a estas mujeres asesinas, que ella denomina homicidas a propósito.

Yo le agradezco que no se rindiese, pues, de haberlo hecho, nos hubiésemos perdido un magnífico libro. Cada uno de los capítulos está dedicado a una de estas mujeres. No solo se nos cuenta el crimen que cometieron sino, también, el por qué del mismo, qué fue lo que les llevó a matar. Uno de los aspectos más positivos que he encontrado es que no elude la coyuntura de cada momento, es más, esta puede ayudar a entender muchas cuestiones. La sociedad que rodeaba a estas mujeres influyó de una forma u otra. El contexto histórico y social es importante y no lo podemos obviar.

Es una lectura adictiva. Al texto acompañan varias imágenes en blanco y negro, así como documentos que nos permiten comprobar la fuente original. En todo momento la autora se mantiene objetiva, aunque entre líneas puedes apreciar que siente una cierta lástima por alguna de estas mujeres, como Corina Rojas, que sufrió una doble condena por ser mujer. Precisamente, es este capítulo (el primero) el que más interesante me ha parecido, ya que habla del movimiento feminista en Chile durante la década de los años 20. Corina Rojas contó con el apoyo del movimiento feminista que luchó para que se le concediese el indulto. Esto es, al mismo tiempo, un ejemplo de que este ensayo no es solo una crónica negra, también lo es social e histórica. La verdad es que, tras leerlo, llegas a la conclusión de que eran unas pobres mujeres que cometieron sus crímenes al verse y sentirse engañadas.

"Las homicidas" es una lectura que nadie debería perderse. Me ha parecido uno de los mejores que he leído últimamente.

Ysabel M.