La larga siesta de Dios

Opinión:

Pep Coll, con su novela "La larga siesta de Dios", nos relata un episodio poco conocido de la historia de Europa que nos toca de cerca.

La novela comienza con uno de los protagonistas principales, Samuel Silverstein, rezando la plegaria del viajero antes de empezar la huida junto a su pequeña familia compuesta por sus ancianos padres y su hija. Algo saldrá mal y él perderá la fe en Yahvé. No creo que haya nada más duro para un creyente que dejar de creer. ¿Dónde estaba Dios el día que los judíos empezaron a ser perseguidos? Es la pregunta que muchos de ellos se hicieron.

Nuestro autor inicia la acción en mayo del año 1940 llegando hasta el año 1944, años cruciales en la Segunda Guerra Mundial, situando a sus personajes en el sur de Francia, cerca de la frontera con España, concretamente en la región del Alto Garona. En las primeras páginas hallaréis un mapa.

Ante todo, amigo lector, debo dejar claro un asunto: esta no es solo una historia de judíos perseguidos, Pep creó protagonistas atrayentes y secundarios inolvidables lo suficientemente importantes, dándole profundidad a los acontecimientos que vais a leer, acompañándose de escenarios reales. Historias dentro de historias, una novela coral. Sabréis de franceses y alemanes, algunos de buen corazón, otros bestias o aprovechándose de dicha situación intentando enriquecerse.

Cuando Samuel lo pierde todo se convertirá en un salvador de los suyos, haciendo lo que él cree que olvidó hacer su Dios. Moviéndose entre las zonas rurales hallará un monasterio en ruinas con varios niños bajo las órdenes de gendarmes. Seiscientas y pico páginas dan para mucho, cada capítulo lleva de título los nombres de los personajes que van a protagonizar dichos acontecimientos. Uno de ellos será Philippe, un niño de doce años con labio leporino. Su camino y el de Samuel se unirán narrando momentos trágicos y maravillosos. También conoceremos a Levy Helmut, un chico con carácter violento que luego nos dará una grata sorpresa. Leeremos de españoles exiliados esperando poder regresar algún día. Pero lo que verdaderamente vais a disfrutar es que conoceremos cómo termina la vida de cada uno de ellos. Nos asombramos ante una novela de matices múltiples, laberíntica e intrigante en la trama, personajes que van creciendo en personalidad según pasa el tiempo, haciendo un relato hondamente terrenal que enternece.

La novela tiene una singular pluralidad de formas: se narra en tercera persona, pero desde el punto de vista del protagonista y a su vez en primera persona, en el diario que va llevando Daniel, otro protagonista clave. Emociona seguir la evolución de los personajes que conoceremos siendo niños y los veremos convertirse en adolescentes afrontando retos.

Esos pirineos que aparecen como una vía de salvación, la meta para conseguir la libertad. Aventuras, historia, muchos personajes viviendo situaciones extremas, la cara o cruz de ser un traidor o un colaborador. Escenas terribles con los nazis tratando como ganado a los judíos. El lenguaje del autor se mueve entre lo familiar y lo intelectual, destacando especialmente en los detalles de los paisajes. Se nota que estuvo en esos lugares, pisó el terreno que describe, se logra sentir el aire que respira de las montañas, el frío que cala hasta los huesos; su documentación tanto paisajística como histórica es maravillosa.

Aunque Samuel Silverstein es un personaje inventado, lo que hizo es real, existieron personas como él pasando judíos tras los Pirineos, salvando vidas. El lector se encontrará con situaciones que le llevarán a plantearse ciertas cuestiones. ¿Enseñar ciencias en las escuelas a esos niños judíos o sobrevivir?

"La larga siesta de Dios" es una ficción basada en hechos reales. Una historia de bondad y maldad, de ayuda y compromisos, dejando instantes de reflexión. Pep Coll, lo tuvo claro: Dios no se olvidó de su pueblo, hizo una siesta larga, pero luego despertó...

Una expedición condenada al fracaso.

Unos adolescentes huyendo de la barbarie.

Unas montañas demasiado altas para alcanzar la libertad.

Grandísima historia.

Violeta Lila