Entrevista a Lorenzo Mediano por "El espíritu del trigo"

Lorenzo Mediano (Zaragoza, 1959), es médico y ha ejercido la medicina en apartados valles del Pirineo. Durante quince años, ha sido instructor de supervivencia, y fue el autor del primer libro sobre esta materia que se editó en España, obteniendo una gran acogida del público, con más de 600.000 ejemplares vendidos (Supervivencias en la naturaleza, 1983). Él mismo nos cuenta en que consistían estos cursillos:

A los veintiún años, pongo un anuncio en la revista Integral, ofreciéndome a enseñar técnicas de supervivencia y, para mi sorpresa, contestan más de cien personas que están interesadas. Durante quince años me dedico a impartir estos cursos, convirtiéndose en mi principal fuente de ingresos.

Los cursos duraban catorce días y, poco a poco, los alumnos iban aprendiendo nociones de botánica, topografía, primeros auxilios naturales... Los dos últimos días se realizaban pruebas en las que tenían que coser un botón, (fabricando el botón, la aguja y el hilo), encontrar plantas medicinales, conservar carne, purificar agua, destilar orina, sobrevivir sin comida, etc. A veces, tras la fatiga, en las noches junto al fuego, tenían lugar momentos literarios, íntimos e incluso de humor. Quienes deseaban perfeccionarse, me acompañaban en un curso superior muy entretenido: atravesábamos el desierto de los Monegros sin agua ni comida, cruzábamos pantanos de noche, saltábamos de un coche en marcha, salíamos del fondo de una poza con una piedra atada al cuello, atravesábamos fuegos, realizábamos escaladas nocturnas, flotábamos en el mar hasta desmayarnos, y nos cosíamos la piel sin anestesia. Eran veinte días inolvidables. Durante el invierno, también dedicábamos un fin de semana para aprender a hacer iglúes.

Los cursos me dejaban tiempo para otras actividades: construir una casita en un apartado valle del Pirineo, tener un par de hijos: David y Diana, e ir acabando medicina. También practicaba el yoga y ciertas técnicas de meditación.

Ha alternado la publicación de libros sobre naturaleza (Vivir en el campo, 1987) con publicaciones técnicas dirigidas a médicos (El burnout y los médicos: un peligro desconocido; El burnout en los médicos: causas, prevención y tratamiento; El dolor en reumatología)

Durante las noches pirenaicas, se formó como narrados de relatos orales, uno de los cuales constituyó la base de su primer libro de ficción (La escarcha sobre los hombros, 1998), que ha alcanzado su sexta edición. Le siguieron Cuentos de amor imposible (2000) y la novela histórica Los olvidados de Filipinas (2001), basada en hechos reales.

En el 2003 inicia una serie de novelas ambientadas en la prehistoria: El secreto de la diosa, Tras la huella del hombre rojo y El espíritu del trigo, publicada recientemente por editorial Grijalbo. Tanto en El secreto de la diosa como en El espíritu del trigo, Lorenzo Mediano parece interesado en narrar sobre todo conflictos familiares, envidias o rivalidades entre miembros de una misma familia. Es decir: ambas novelas parecen tener muy presente el mito de Caín y Abel. Por otro lado, se sugiere, tanto en una como en otra, un enfrentamiento primigenio entre hombres y mujeres en la prehistoria. Digamos que el poder al principio lo ejercían las hembras pero los machos se lo arrebataron, una curiosa teoría sin duda alguna. El espíritu del trigo describe el comienzo de este conflicto, que tiene su continuación, curiosamente, en el primer título de la saga "El secreto de la diosa". La segunda novela de la saga, Tras la huella del hombre rojo, describe en cambio el enfrentamiento cultural entre Neardentales y Cromañones.

Hablamos con Lorenzo Mediano sobre "El espíritu del trigo"; último título, hasta el momento, de la serie. 

ENTREVISTA

Esta novela es el tercer título de una serie de novelas ambientadas en la prehistoria, formada por: El secreto de la diosa, Tras la huella del hombre rojo y El espíritu del trigo. ¿Cómo surgió la idea? ¿Lo tenías pensando así antes de escribir el primer título de la serie o surgió a raíz del éxito de ventas y público de ésta?

El secreto de la diosa surgió cuando me hice una pregunta, muy sencilla pero muy turbadora: si la evidencia arqueológica indica que durante el paleolítico existió un matriarcado, ¿cuándo fue sustituido por el patriarcado? ¿Por qué? ¿Cómo?

Las otras dos novelas sobre la prehistoria las escribí porque me di cuenta de que en la prehistoria se ocultan las raíces de problemas muy actuales: la xenofobia y el cambio climático. Aunque, por supuesto, si El secreto de la diosa no hubiese tenido éxito de ventas y público, las otras dos novelas no se habrían escrito.

¿Cuáles son las diferencias esenciales entre los tres títulos de la serie y cuáles los elementos comunes?

En cuanto al estilo, poseen características semejantes: emoción, sencillez aparente bajo la que se esconde mucho trabajo, acción, diálogos... Los protagonistas de las tres novelas son marginados sociales: un tullido, un extranjero de otra especie y una muchacha maldita por los dioses. Y los tres luchan contra su terrible destino, con mejor o peor fortuna.

La mentalidad mágica es un elemento común a la prehistoria, y muy interesante para un lector actual.

Diferencias: son novelas independientes, no una trilogía. Ni los protagonistas, ni el lugar, ni la trama tienen nada que ver entre sí.

En esta ocasión, curiosamente, se nos describen acontecimientos anteriores a la primera novela; o lo que es lo mismo El espíritu del trigo termina donde empezaba El secreto de la diosa. ¿Por qué no continuar mejor donde dejaste el segundo título de la serie: Tras la huella del hombre rojo?

Porque lo que buscaba con esta trilogía era ofrecer al lector una oportunidad para reflexionar sobre los orígenes de conflictos actuales. Y el origen estaba allí, en ese preciso instante, y yo no lo podía cambiar.

En esta novela el poder está repartido entre tres personas: El poder político y religioso del poblado se reparte entre La Madre, el chamán (aunque realmente la que lo ejerce en toda su plenitud es ella, Ghea) y Kar, líder del grupo de cazadores-guerreros. La novela describe las estrategias del shaman y del guerrero por alzarse con el poder absoluto y de ella por mantenerlo, por que nadie se lo arrebate… es decir, el conflicto entre el poder femenino y el masculino…

¿Es cierto que en aquellos tiempos en un principio el poder lo ejercía la mujer tal como describes en el secreto… y en el espíritu… o es una mera excusa argumental?

Existe consenso entre los prehistoriadores en que el papel de la mujer era predominante: todas las estatuillas de dioses eran femeninas, y eso refleja el poder de las mujeres.

Por otro lado, siempre que existe poder se producen intentos de usurparlo, de arrebatarlo y de defenderlo. En una sociedad pequeña, como la tribal, esto es mucho más claro que en la actual.

Me llama la atención en ambas novelas, el uso del sexo como recurso para alcanzar el poder, desestabilizarlo, etc.

En la lucha por el poder, el sexo siempre ha constituido un arma importante. Y si no, que se lo pregunten a Bill Clinton.

¿Te has basado en algún tipo de tribu indígena actual o del pasado para describir las costumbres, ritos, etc… de los personajes?

No, he creado una sociedad tribal aunando distintas culturas. En la realidad, toda cultura tiene enormes contradicciones; pero no nos gustan en las novelas.

Subrayas mucho el tema de la superstición religiosa de estos primeros pueblos, como la religión es un recurso clave para tener controlada a la población.

Lo excepcional, en la historia de la Humanidad, es que la religión tenga poca importancia, como en nuestra cultura actual.

¿Los remedios curativos - por ejemplo, colocar sobre la piel hojas mordisqueadas de llantén y malva para sanar de las picaduras de abejas - son realmente efectivos?

Sí. A lo mejor no son tan eficaces como una inyección de corticoides, pero funcionan. Al menos, los que pongo en mis novelas.

Se habla ya de rangos ¿crees realmente que en esa época ya existían esos desequilibrios sociales? Las labores más denigrantes las realizan los de rango inferior...

Siempre han existido rangos, la sociedad igualitaria es un mito. Pero una sociedad nómada es fluida: no se puede acumular. El rango cambia según las circunstancias, depende de la salud, de las amistades, del mana (poder mágico), de la suerte en la caza... Con el sedentarismo, las clases sociales se petrifican.

Desde mi punto de vista, en ambas novelas pareces tener muy presente el mito de Caín y Abel.

Los mitos son, en mi opinión, fuente de literatura.

¿Piensas continuar con la saga?

De momento, no. A no ser que descubra en la prehistoria el origen de otro de los problemas de la actualidad. Lo que tenía que decir, ya lo he escrito.

¿Piensas volver algún día a aquellos relatos más costumbristas, intimistas o poéticos con los que iniciaste tu carrera como novelista?

No los he abandonado. El año pasado publiqué una novela costumbrista, Donde duermen las aguas.

En estos momentos, en la casilla de salida, tengo dos ensayos, una novela histórica, una trilogía de novela histórica, una novela de humor, una novela costumbrista y una novela actual. Lo que sucede es que tengo que elegir el orden en que escribo.

¿De qué modo tu profesión de médico te ha podido ayudar en la creación de esta trilogía?

Como médico, he estado en contacto con el dolor y la muerte, que en nuestra sociedad se barren debajo de la alfombra, pero que acompañan al ser humano.

¿Intentas reflejar en estas novelas sobre la prehistoria, una cierta nostalgia o reivindicación de la vida natural, algo que, por otro lado, forma parte de tus aficiones más destacadas?

Una nostalgia... La vida era corta y dura, pero muy intensa y bella. Siempre sentimos nostalgia por lo que no puede volver.

Pues nada más, Lorenzo. Espero te haya parecido agradable esta entrevista. Si deseas añadir algo más.

Muchas gracias por tu amabilidad. Hasta pronto.

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