El cuento de la luna

Opinión:

Anna Morató García es autora de cuentos infantiles, entre los que destaca De mayor quiero ser… feliz, Creo en ti o Vamos a llevarnos bien. A raíz del nacimiento de su hija y con la intención de transmitirle la importancia de ser positivo en la vida, empezó a escribir cuentos. En sus libros transmite mensajes positivos, ayuda a conocer y gestionar las emociones y fomenta la autoestima de los más pequeños.

"El cuento de la luna" es su último trabajo, donde aborda la importancia de ser positivo ante la vida y de escuchar nuestra voz interior, aquella que nos alienta a ser capaces de conseguir todo que nos propongamos.

Las ilustraciones de Xavier Bonet son bonitas y delicadas, tienen un aire tierno y entrañable muy acorde con la historia que acompañan. En ellas predominan los colores suaves y transmiten a la perfección el mensaje de la autora: no hacer caso a las palabras de desaliento de los demás y confiar más en uno mismo.

Me ha gustado mucho cómo la autora aborda este tema, haciéndolo fácilmente comprensible para los más pequeños. A través de esta fábula, los niños/as comprenderán la importancia de las palabras y el daño que pueden hacer minando la confianza, pero que igualmente pueden dar fuerzas para perseverar, para seguir intentándolo. En sus propias palabras… "Solo porque alguien te diga que no conseguirás hacer algo, eso no significa que sea verdad."

El lenguaje que emplea es claro y sencillo, algo fundamental a estas edades. La letra tiene un tamaño adecuado para que sean los propios niños/as quienes lean el cuento y el formato grande y en tapa dura, hará que sea fácil y cómodo de manejar.

Los libros de Anna Morató, entre ellos "El cuento de la luna", son perfectos para trabajar temas como el lenguaje positivo, la confianza, la gestión de emociones, la empatía, la autoestima o el agradecimiento, entre otras cosas, valores fundamentales que debemos inculcar a los más pequeños para que lleguen a ser adultos felices y consigan todo lo que se propongan.

Una lectura muy recomendada.

Mónica CZ