Casada con el enemigo

Opinión:

En "Casada con el enemigo", Raquel Alonso nos narra una estremecedora historia: el proceso de fanatización religiosa que vivió su marido hasta acabar detenido por terrorismo en 2014 en medio de una amplia operación policial.

Del relato de Raquel Alonso sobrecoge la sencillez y la cotidianeidad: a veces vemos estos episodios de extremismo religioso como algo lejano, que ocurre lejos de nuestra casa. Sin embargo, a través de su historia descubrimos que el proceso es mucho más sencillo e inocuo y que puede pasar delante de nuestros ojos sin que apenas nos demos cuenta. Es lo que narra la autora de "Casada con el enemigo": era un matrimonio feliz, con hijos y un trabajo que les permitía vivir cómodamente. Sin embargo, la conducta de su esposo comienza a cambiar y, casi de la noche a la mañana, comienzan a sucederse cambios. Sin embargo, nada hacía prever el fatal desenlace que iba a vivir la familia, o quizás, lo que más sobrecoge de este relato es que desde fuera sea fácil verlo pero no desde dentro. La propia autora lo cuenta en esta historia que se torna en pesadilla a medida que pasan las páginas.

Es precisamente la manera de narrarlo, manteniendo la cronología y de una manera tan natural que hace que el lector empatice de lleno con las situaciones vividas y llegue a sentir la angustia que día a día iba llenando el hogar de Raquel y sus hijos hasta encerrarlos en un callejón sin salida.

En esta biografía, Raquel Alonso narra cómo el fanatismo puede instalarse en casa de la manera que menos lo esperas y cómo logra poner patas arriba un hogar de manera silenciosa. Y estremece, aún más, el relato de cómo la autora llegó a ser consciente de la situación y decidió afrontarla en solitario, creando un plan que no la delatara ni pusiera en peligro la vida de sus hijos. Todas estas vivencias nos hacen preguntarnos muchas cuestiones que quedan sin respuesta, pero que pueden resumirse en "¿Hasta dónde es capaz de cegar el fanatismo a un ser humano?".

"Casada con el enemigo" es un testimonio interesante, duro de leer. Un relato que nos desgarra en cada página al comprender el sufrimiento de una mujer que actúa movida por una sola motivación: que no le pase nada a sus hijos. Quizás esta es la parte más dura de la historia: cómo los hijos del matrimonio son adoctrinados por el padre para intentar enseñarles la parte más violenta y fanática de su religión, mientras su madre intenta protegerlos haciendo auténticos sacrificios para no destapar sospechas.

Raquel Alonso logra condensar en estas páginas la evolución de lo que consideraríamos una persona normal, hacia el fanatismo islamista más profundo. En el libro no se entra en justificaciones, no se juzga ni se buscan culpables ni víctimas a la conducta de su marido: simplemente se cuenta lo vivido, las situaciones pasadas y el primero de los desenlaces de este caso, que por desgracia aún sigue abierto. Este relato no es una guía para saber si una persona se está radicalizando, pero sí puede ayudar a muchas familias a no pasar por el mismo sufrimiento si descubren ciertas pautas. Y puede arrojar un poco de luz sobre el proceso para que intentemos comprender por qué suceden estos casos.

Una historia valiente, escrita desde el corazón y que, como la autora señala, espera que sirva para evitar "la tortura y el sufrimiento" que ella y sus hijos tuvieron que afrontar.

Marina Montes