No hay manera (Hermanos Martí 5)

Opinión:

Anna Casanovas ejerce como traductora literaria, labor que compagina con la escritura de sus novelas. Desde sus inicios como escritora se decanta por la literatura romántica, dentro de la cual también ha escrito romance paranormal bajo el seudónimo de Emma Cadwell. Además, es una de las fundadoras de la Asociación de Autoras Románticas de España.

"No hay manera" es el último volumen de la serie "Hermanos Martí", cuyos títulos, curiosamente, tienen nombre de canciones famosas haciendo coincidir con algún detalle de la narración.

Esta saga familiar fue publicada por primera vez en 2008 con un gran éxito. La editorial Titania ha decidido reeditar con un carácter renovado, algunas modificaciones y un quinto volumen inédito hasta la fecha. Un libro con el que los fans más acérrimos de la autora estaban deseando encontrarse.

Esta novela romántica contemporánea trata de una forma delicada y profunda las segundas oportunidades, los sacrificios y el deseo de superarse y perseguir los sueños.

La protagonista de esta obra es, sin duda alguna, Martina, personaje entrañable que aparece a lo largo de toda la saga y con su halo casi mágico deja tras de sí la sombra de misterio que se descubrirá en su propia novela.

Es a través de ella, en donde Anna pone de manifiesto el trabajo de los escritores negros, su gran labor y el poco reconocimiento que se le da. De una forma sutil y con gran conocimiento del tema, Anna nos sumerge en el mundo editorial revelando alguno de sus entresijos y haciendo una pequeña crítica de la misma.  

Con una narración ágil y dinámica, la trama nos dirige por dos líneas argumentales bien diferenciadas. Por un lado, descubrimos la juventud de Martina y su historia con Leo, el protagonista masculino, quienes tras conocerse inician un romance, un tanto tóxico, sembrado de inseguridades, falta de comunicación y malentendidos asociados a la inmadurez, que tiene un mal final. Por otro lado, varios años después, se reencuentran con una marcada evolución personal y unos objetivos mucho más definidos. A pesar de sus diferencias deben colaborar y es aquí cuando hacen un trabajo íntimo que les permita sanar heridas.

Se trata de una novela que encierra grandes mensajes y a su vez nos regala una historia de romance bonita, que aprende de los errores, que lucha por superarse y que cierra cicatrices del pasado desde la comprensión, el diálogo y el perdón.

A lo largo de la trama descubrimos la transformación de ambos personajes, así como su lucha interna entre sus deseos y obligaciones. Tanto Leo como Martina, se desenvuelven en unos ámbitos complejos y difíciles de manejar, sin embargo, a diferencia de Leo que tiene su futuro marcado a fuego como una meta inquebrantable, Martina presenta inseguridad y miedo a fracasar o decepcionar a los que los rodean. Ambos encarnan personalidades con las que cualquier lector puede verse fácilmente identificado.

La ambientación es ideal para cualquier época del año, pues una buena parte de la historia se desarrolla en las playas de Barcelona, mientras otra se ubica en las frías montañas escocesas.

Personalmente, es una novela que he disfrutado por la naturalidad de la historia, su credibilidad y la humanidad de sus personajes, quienes se muestran con todos sus aciertos y sus errores, aprenden de ellos mismos y marcan un ejemplo de relación sana basada en la amistad y el diálogo.

Otro aspecto que me ha gustado es como la autora sumerge a la familia Martí y los protagonistas de sus anteriores novelas en esta historia, desarrollando paralelamente sus vidas y dando pequeñas pinceladas de las mismas, tocando temas como la separación, la adopción, la familia, el amor de pareja o la maternidad.

Sin duda, "No hay manera" es un romance contemporáneo que recomiendo abiertamente, bien como novela independiente o como un final excepcional de esta entrañable familia a la que, tras la última página, cuesta despedir. 

Marisa Costa