Anika entre libros

Cenizas

Ficha realizada por: Anika Lillo
Cenizas

Título: Cenizas
Título Original: (Cenizas, 2017)
Autor: Juan de Dios Garduño Cuenca
Editorial: Palabras de Agua


Copyright:

© Juan de Dios Garduño Cuenca, 2017

© Ilustración cubierta: Iván Ruso

© Diseño cubierta: Kike Alapont

© Ilustración interior: Claudio Sánchez Viveros

© Maquetación: Forjadores de Sueños

Ilustraciones: B/N
Edición: 1ª Edición: Junio 2017
ISBN: 9788494654954
Tapa: Blanda
Etiquetas: novela terror miedo horror aislamiento supervivencia supervivientes dioses primigenios monstruos violencia fin del mundo distopía el bien y el mal inmortales literatura española
Nº de páginas: 228

Argumento:

Han pasado diez años desde que Peter y Ketty sobrevivieron al ataque de los albinos en Bangor. Ahora están en Villa Salvación, un fuerte  con supervivientes que hacen vida bajo el mandato del Coronel. Al no obtener respuesta de otros supervivientes, éste marcha en una expedición para averiguar qué ha podido pasar. La sospecha de que los albinos han vuelto corre por las cabezas de los supervivientes.

Cuando el Coronel se marcha, deja la responsabilidad del fuerte a Peter, y éste tiene que enfrentarse con un asesinato de lo más inesperado: una niña es acuchillada, y el sospechoso número uno es un tipo en apariencia tranquilo que en realidad está traumatizado desde su infancia y vive con seres invisibles. Peter no cree que él sea el asesino, pero si esto es así sólo puede acabar peor de lo que empezó.  Y eso ocurre.

Al mismo tiempo dos hermanos viajan buscando más supervivientes y localizan a un joven que está huyendo de un vaquero llamado Rick que tiene la capacidad de dirigir a un ejército de albinos sumisos sin despeinarse.

 

Opinión:

 

"Cenizas" daría explicación al posible origen de los monstruos albinos que actuaban como zombis de un infierno helado que conocimos en "Y pese a todo…" también titulada "Extinction" gracias a la película que dirigió Miguel Ángel Vivas para el cine (con Matthew Fox, Jeffrey Donovan y Clara Lago). Esta es, quizás, la parte que más me ha interesado de la novela, aunque hubiera agradecido un poquito más de atención en ella porque realmente sólo aparece al final y contado muy deprisa. Además no me queda tan claro porque en la primera novela hablaba de agentes químicos producidos durante la tercera guerra mundial, y aquí aparecen dioses primigenios -y en particular un monstruo del interior de la tierra que me recordó a una peli-. Aunque veo la relación, me hubiera encantado que Juande le hubiera dedicado más tiempo a los albinos y a su relación de sumisión con Rick.

Y pese a todo (bromita) la novela me ha gustado. No sólo porque sea ligera y se lea rápido -eso se agradece mucho cuando algunas hacen que te atasques y te duren demasiado- si no también porque tiene escenas de terror muy potentes. Se hacen cortas, pero tiene varias. Los lectores recordamos a los albinos como una serie de monstruos humanoides de comportamiento zombi (comer humanos era su deporte favorito) tanto por la tierra como por el cielo, pero en este caso sólo están ahí al servicio de la trama de terror como secundarios, aunque protagonicen algún momento terrorífico. Y también puede confundir un poco que en esta novela se hable de inmortalidad y beber sangre, porque nos recuerda mucho a los vampiros. Y nada que ver.

En esta novela los albinos son actores secundarios. Los principales son, de nuevo, el padre y la hija (Peter y Ketty), un vaquero llamado Rick que se aparece en pesadillas a algunos personajes (y que evoca a un personaje de Stephen King en "Apocalipsis" [titulada también "La danza de la muerte"]), un joven llamado Norman que es perseguido por el vaquero, y un par de hermanos que viajan en busca de más gente porque llevan una década sin ver a nadie más que a ellos mismos. El resto son personajes de Villa Salvación, y en este aspecto la novela es mucho más coral, por ello destacan Irwin (un vecino que no parece estar en sus cabales) y Ralph Lee (otro que tiene más de psicópata que otra cosa), amén de los soldados, el médico, otros vecinos, o la madre de las gemelas, aunque su aparición, como la de la pareja de Peter, son muy secundarias.

Y es que esta novela tiene mucho de cinematográfica: son muchos personajes que se reparten el peso, por lo tanto aunque ya conocemos a Peter y a Ketty (ahora más mayor) de antes, no les vemos como protagonistas absolutos.

Eso hace también que la novela sea rapidísima de leer (en un día o dos te la zumbas), pero que le falte algo de literatura como sí tenía la de "Y pese a todo…", más centrada en la narración y en el perfil psicológico de los personajes que ésta. Y no deja de ser curioso porque justamente "Cenizas" se centra mucho más en la condición humana, aunque parezca que lo haga superficialmente.

Gustará especialmente a quien quiera pasar un par de ratos con la impresión de estar leyendo una película de terror (que no guion), o a quienes estén interesados en saber qué ocurrió con Peter y Ketty años después.

Anika Lillo

 

 

Foto homenaje:

Cenizas -juande -tuneado

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