Una saga moscovita

Opinión:

"Una saga moscovita" es, en realidad, un libro compuesto por tres: El primero, se llama "La Generación del Invierno", el segundo, "Guerra y Prisión" y el tercero y último, "Prisión y Paz". En los tres, se encuentran extractos de periódicos tanto rusos como extranjeros, en los que se pueden leer las distintas impresiones, propias y ajenas de los acontecimientos que se narran.

A lo largo de estos tres libros, los personajes se ven involucrados en sucesos terribles. Algunos logran sobrevivir y otros no, pero todos son víctimas de la verdadera protagonista de la trama, que no otra que la propia Historia con mayúsculas: La post-revolución y sus excesos, los crímenes silenciados y disfrazados de patriotismo, la eliminación sistemática del enemigo político al principio y de cualquiera después, las torturas, los abusos de los poderosos, la Segunda Guerra Mundial y los pactos políticos incumplidos sin ningún pudor, la creación, en definitiva, de un mundo distinto donde reina el terror. Así, hasta la muerte del tirano.

También son protagonistas los personajes que desfilan por sus páginas como títeres en las manos del destino: Boris Nikítovich Grádov, o Boris III, el patriarca familiar, médico brillante lleno de dignidad y principios que ve, impotente, cómo su tierra va perdiendo la razón cada vez más; su esposa y madre de sus tres hijos, Mary, pianista y pilar familiar; su hijo mayor, Nikita Borísovich Grádov, brillante militar, padre, a su vez, de Boris Nikítovich Grádov (igual que el abuelo) llamado Boris IV, que será el protagonista de la tercera parte; Kiril, historiador y bolchevique, ferviente defensor de la Revolución; Nina, la hija pequeña, poetisa cosmopolita llena de entusiasmo… al principio, y tantos otros derrotados o ensalzados por las circunstancias, y, a veces, ambas cosas.

Las descripciones de las prisiones y de la represión política en general, son espeluznantes, y desgraciadamente, relistas.

Y de fondo, el "Bosque de Plata", la casa familiar símbolo del refugio, de la felicidad pasada y de la esperanza futura, símbolo, en fin, de la familia Grádov.

Vasili Aksiónov fue hijo de represaliados políticos encarcelados y enviado a un orfanato hasta que un tío suyo lo encontró y lo llevó con su familia hasta el regreso de su madre. Aksiónov se licenció en Medicina en 1956 y escribió varias novelas. 

En 1980 emigró a Estados Unidos.

Mercedes Cuadrado Miranda