Siete islas

Opinión:

"Siete islas" es una obra de ficción y misterio escrita por Jonás Ramírez Molina, nacido en Sabadell en 1975. Es licenciado en Traducción e Interpretación por la Universitat Autònoma de Barcelona y este es su primer libro.

La novela se divide en dos partes. En la primera, Mario, después del accidente, empieza a visitar las Islas Canarias. Aquí se percibe claramente la atracción y fascinación que el archipiélago canario le produce al autor. Ha querido hacer un homenaje a los hermosos paisajes y a la riqueza cultural de las islas. Nos describe geográficamente cada una de ellas con riguroso detalle y lo más importante es que consigue trasladar esa admiración que siente al lector. El fundamento de la trama en esta parte es conseguir unas extrañas piedras que hay en cada isla para que al final Mario pueda descifrar un misterioso mensaje.

De la segunda parte casi no voy a hablar para que os pueda sorprender como me sorprendió a mí. Leí con mucha atención los dos últimos capítulos que incluían el desenlace, porque pienso que son los más delicados y difíciles del libro. Un error ahí, de no hacerse entender bien, hubiese comprometido el excelente trabajo de la narración. Diré con agrado que el autor logró desarrollar el final satisfactoriamente. Las paradojas y especulaciones que conlleva el argumento entran de forma razonable en el marco de referencia de la ficción que el autor ha creado.

En un capítulo hay un diálogo de Mario con su psiquiatra en el que sale a relucir la serie "Lost", que en España fue conocida como "Perdidos". Una serie espectacular, con una trama muy atractiva y que a mí me enganchó desde el primer minuto. Cuando terminé el libro, lo primero que vino a mi mente fue esa conversación, y creo que esta narración tiene ecos de esa serie. El misterio que encierra la historia juega con los conceptos "Tiempo", "Espacio", "Pasado" y "Futuro". En consecuencia, diría que esta novela no solo es de misterio y aventuras, sino que también puede definirse como ciencia ficción.

El estilo del autor me ha gustado, es directo, claro y descriptivo, y con ello consigue que sea más fácil la imaginación y visualización del relato. El texto está escrito en primera persona y nos produce un mayor acercamiento a los pensamientos y sentimientos del protagonista. Al principio, la obra tiene un ritmo lento por la representación tan detallada que hace de las islas, pero hacia la mitad, más o menos, la narración coge impulso y la inquietud aumenta. El final es asombroso, muy original e inesperado.

Me gustaría felicitar a Jonás Ramírez porque ha escrito una historia inteligente, sorprendente y entretenida, y sin duda, recomiendo firmemente su novela.

M. Zeta