Shaker Monster 1. ¡Sálvese quien pueda!

Opinión:

"Shaker Monster" me parece una buena opción de lectura para los niños y no tan niños. Es entretenido, divertido y educativo.

Mr Tan nos trae las aventuras de dos hermanos. Cómo casi todos los hermanos, es típico que se hagan gamberradas, se peleen, se pinchen entre ellos... y nuestros protagonistas son así. Además de que el hermano, Justin, es un trasto, me ha recordado mucho a los famosos Zipi y Zape.

A raíz de encontrar la coctelera de monstruos, Justin crea sin querer a gorgoteo, y se despiertan con la casa llena de babas.

Pero gorgoteo no es el único monstruo que vive en la coctelera, en "Shaker Monster" conoceremos también a apestoso y mimitos, que nos harán pasar momentos muy divertidos.

En la aventura de la caza de gorgoteo y apestoso, Mr Tan nos enseña que, a pesar de las diferencias, nuestros dos hermanos se quieren, se cuidan y se protegen. Gwen no va a dejar que los padres le echen la culpa sólo a Justin, ella también asume parte de la responsabilidad. Además de que, con la ayuda del abuelo, consiguen trabajar juntos para arreglar la situación antes de que lleguen sus padres y encuentren la casa patas arriba. Vemos que juntos conseguimos más que si cada uno trabaja por su lado, algo que no sólo los más pequeños de la casa tienen que aprender, si no también los adultos, que muchas veces nos movemos por el interés de manera independiente, sin pararnos a pensar en los demás y en lo que es mejor.

Gwen es la más sensata de los dos, y consigue que Justin entienda que no puede seguir siendo así de malo, que en esa situación tiene que pensar y estar unidos por el bien común. Durante la historia, aprendemos que hay un momento para todo, para divertirse y para ser responsable. Ambas actitudes son compatibles y es algo que me ha gustado ya que es importante enseñárselo a los niños desde pequeños. Un momento de broma y risas puede estar bien, pero si después no es lo correcto, tienen que saber cambiarlo, y comportarse dependiendo de la situación.

Las ilustraciones, por parte de Mathilde Domecq, son divertidas y de colores muy alegres. Me han recordado a ciertos cómics antiguos, tipo Mafalda o Zipi y Zape, por los trazos que vemos en las viñetas. Tienen muchos detalles y sobre todo me han llamado la atención los monstruos, me parecen muy original el aspecto que les ha dado a cada uno de ellos.

Espero que pronto podamos leer más aventuras de la coctelera y conocer a más monstruos que habitan en ella.

Vane Gómez