Sobre María Zambrano. Misterios encendidos

Opinión:

En estos tiempos en los que se intenta revisar el pasado en busca de joyas perdidas (o poco visitadas) del pasado, la cultura española asiste a una valoración al alza de María Zambrano (Vélez-Málaga,  1904 - Madrid, 1991) que es un gozo para todos aquellos que le profesamos admiración. Me gusta escribir que la autora malagueña es una llama que no se extingue. No hay texto arcano o suelto poco extendido que no tenga interés. Ya he reseñado alguna vez en este portal alguno de esos volúmenes de sus obras completas que Galaxia Gutenberg publica de manera periódica (la última, edición preciosa de sus libros Notas de un método, Algunos lugares de la pintura y Los bienaventurados), y libros como el de Antonio Colinas son siempre una buena noticia.

Lo que reseño ahora no es un libro de María Zambrano sino sobre ella, cuyo primero mérito es venir de un autor al que reconozco buenas cualidades, Antonio Colinas (La Bañeza, 1946). Son muchos los registros que domina, pero se le reconoce sobre todo como poeta, teniendo en su haber una dilatada trayectoria como ensayista y crítico literario.

Si adelanto que detrás de este ensayo sobre María Zambrano está la voz de Antonio Colinas, ya les estoy asegurando que el volumen gozará de una prosa agradable, limpia, bien machihembrada. El libro se lee sin que uno se de cuenta. Se trata de un discurso salpimentado con un sinfín de anécdotas de la cultura y el mundillo literario de cada época retratada, que Colinas domina. "Sobre María Zambrano" es, sobre todo, la declaración de amor del poeta a la extensa obra de la escritora malagueña. El segundo de los capítulos, titulado "La carta que no envié a María Zambrano" es esencialmente eso, una forma que encuentra Colinas de dar las gracias por tantas enseñanzas.

No piensen en "Sobre María Zambrano" como en un ensayo al uso. Se trata de artículos autónomos, acumulados sin un plan reconocible, retazos sobre la autora que acaban formando un libro. Ello no le resta valor alguno. Cada capítulo tiene su propio interés, y el conjunto es notable. Les presento algunos de los títulos de capítulo para que se hagan una idea de lo que en él se encuentra: "Una poética radical", "Aproximación a El hombre y lo divino", "De la palabra esencial", "El Unamuno de María Zambrano", etc.

El libro no es solamente sobre María Zambrano, sino también sobre Antonio Colinas, o más específicamente un recorrido de admiración del autor leonés por la filósofa. Se nos habla de las cartas que se enviaron, sus llamadas de teléfono, las veces que gozó de su compañía. El libro queda ilustrado por fotografías de momentos y lugares clave de María Zambrano, y aún de los encuentros con la autora que quedan referidos en el texto.

Es también una buena guía de lectura por sus textos, una invitación personal a conocer mejor a María Zambrano, e incluso un texto importante para entender mejor los momentos de cambio de su pensamiento, las fuentes de las que bebió, la importancia de lo sagrado y la religión católica. En definitiva, un buen libro para recordar(nos) la vigencia de cuanto escribió esta mujer que es cumbre del pensamiento español del siglo XX.

Rafael Ruiz Pleguezuelos