Mala sangre

Opinión:

Esta obra es un magnífico ejemplo de periodismo de investigación, de rigor en la búsqueda de la verdad, pero también es una demoledora radiografía de la vorágine inversora y de innovación tecnológica que rodea al pequeño universo de Silicon Valley.

En sus páginas no falta de nada para ofrecer casi una tragedia bastante teatral, porque cuenta con protagonistas casi sacados de una impactante ficción literaria, porque estos aparecen como complejos villanos ávidos de poder y riqueza a cualquier precio, obsesionados con ser imitadores aventajados, secuelas de mitos, de seres míticos en ese pequeño mundo como fue Steve Jobs, y para los que el riesgo o incluso daño a las personas no es más que un asunto colateral, que no puede estorbar su gran proyecto empresarial que pretende cambiar el mundo.

En una cuidada puesta en escena y precisa estrategia de seducción colectiva, a pesar de una tecnología fallida, una joven con una ambición desmedida consigue engañar a experimentados gobernantes, militares de alto rango, inversores curtidos en mil batallas empresariales, incluso seducir a la extraña comunidad de frikis millonarios del valle californiano donde se cuece la mayor explosión de innovación tecnológica del planeta. Una compañía, un trágico fraude, que llegó a conseguir una valoración corporativa de 9.000 millones de dólares, para valer 0 en unos pocos meses cuando al final se destapó el engaño.

El auge y caída de Theranos, la start up que quería revolucionar la medicina del mundo, discurre de forma paralela al de su promotora, una niña rica que deja los estudios en una de las mejores universidades del mundo, Stanford, para conseguir ser multimillonaria en un corto plazo de tiempo y, de paso, alcanzar su sueño de llegar a ser la Steve Job de su generación.

Además de su rigor, el libro se lee como un magnífico relato de aventuras empresariales, como la crónica de un colosal fraude que consigue sortear las autoridades sanitarias públicas mediante la simulación y el engaño. Pero también retrata con implacable eficacia la exageradamente sencilla fascinación de millones de personas por un proyecto empresarial sin más sustancia que un cuidado marketing tecno-empresarial. Una buena puesta en escena, en el lugar y momentos adecuados, tiene más capacidad de atraer cifras millonarias de vértigo que un simple análisis técnico de la viabilidad de una nueva tecnología.

Un mundo en el que es trágicamente fácil invertir en expectativas sin sólidos fundamentos, porque están inmersos en una cultura en el que la posibilidad de hacerse más millonarios solo es cuestión de una ruleta rusa económica basada en expectativas. Este libro es absolutamente recomendable a quienes les interesen las historias de engaños y fraudes, pero sobre todo para lo que quieran entender cómo se mueve en Norteamérica el mundo de las start ups, los fondos de inversión, el marketing empresarial para conseguir levantar capital, y sobre esa corte de los milagros en la que se ha convertido ese singular valle californiano.

También es una buena obra para entender cómo es el contexto cultural en el que se mueve la economía norteamericana y sus empresas, sus valores, sus fallas, sus contradicciones y su peculiar relación amor odio con el riesgo del dinero invertido en empresas que a veces no son más que ilusas y fraudulentas añagazas para que unos pocos ocupen portadas de revistas, salgan en televisión y se hagan obscenamente ricos por el camino. No dejen de leer esta magnífica pieza de periodismo de investigación económico.

Jorge Riet