El Gabinete de las Maravillas de Mr. Wilson

Opinión:

Finalista del Premio Pulitzer y del National Book Critics Circle Award. Un artefacto literario sorprendente que celebra la tradición de lo maravilloso en nuestra cultura.

Novela experimental como pocas, "El gabinete de las maravillas de Mr. Wilson" de Lawrence Weschler es un prodigio de la literatura borgiana, una obra no tanto imprevisible, que lo es, sino también inusual por original y genuina...

El autor nos presenta el museo de tecnología jurásica de los Ángeles, donde nos llevará por una visita guiada a un mundo de desconcierto y estupefacción, de la mano del conservador David Wilson. En este gabinete de curiosidades donde todo es posible, veremos una especie muy rara de hormigas con aguijones, cuernos en cráneos humanos, ratas con mutaciones extrañas, y también novedades de las proyecciones psíquicas, como la alquimia y la cruza entre la ciencia y la historia natural. Mapas hechos con partes del cuerpo, el esqueleto de un centauro, todo en fotografías en blanco y negro, que generarán una verdadera confusión en el lector. Pero ahí es donde quiere llevarnos el autor, y lo mejor que podemos hacer es dejarnos llevar por este viaje alucinante.

La amalgama entre lo real e imaginario produce espectáculos dignos de ver. El morbo y la ansiedad ante lo diferente y anómalo impregna esta obra corta de no más de doscientas páginas, donde es difícil separar realidad de ficción. Incluso el autor se sirve de la historia del arte y de la literatura, dividiendo al libro en dos partes: la primera trata sobre una extraña espora que afecta el cerebro de las hormigas, que hace crecer un aguijón en sus cabezas para luego expandirse para afectar al resto del nido. En la segunda, se nos narra sobre la historia de los museos, desde los gabinetes de los primeros coleccionistas de los siglos quince, dieciséis y diecisiete, donde estos gabinetes estaban hechos con objetos de arte provenientes de la naturaleza, y que destacaban por su notoriedad y exquisitez.

Por supuesto que es una obra tan adictiva que se antoja demasiado corta, y claro que queremos saber más sobre estas obras que nos generan tanto sentido de la maravilla. Es un ejemplo perfecto de cómo mezclar realidad y ficción y hacer que todo lo descrito parezca verdadero dotándolo de una pátina de verosimilitud que no dejará de asombrarnos y atraernos por partes iguales. Este libro además fue finalista de un premio Pulitzer en los noventa, lo que ya nos habla de su calidad superlativa.

Tiene también un anexo con notas para no perdernos de ningún detalle que nos haya despertado la curiosidad. El museo de tecnología jurásica es un sitio que nos invita a recorrerlo interminablemente, encontrando siempre entre sus paredes historias insólitas, fenómenos de la ciencia y la naturaleza de los que jamás leeremos en ninguna otra parte. Ecos de un mundo que pudo haber existido en las mentes de grandes pensadores como Borges o Calvino, para quienes en nuestras mentes convivimos con múltiples mundos diferentes a este, con millones de posibilidades distintas, y estas son las anécdotas que viene a contarnos este fabuloso gabinete de las curiosidades. Todo un nuevo museo literario por descubrir que, de tan maravilloso, se nos quedará pequeño para estar condensado entre las páginas de un libro. Pero el viaje por entre sus paredes bien valdrá la pena.

Simplemente extraordinario.

Violeta Lila