Hierro fumando

Opinión:

Una proeza literaria se aloja en esta pequeña joya editorial. Elegante, precisa, emocional, bella, humana, terriblemente humana.

Una obra que permite adentrarse en el universo personal y literario, sobre todo vital, de ese gran escritor que fue José Hierro. Con unas imágenes contundentes, sólidas, vehementes, fieles a la imagen del biografiado, a su contexto, respetuosas de su emanación vital, de su creación, su vida, su intensa existencia, eficaces en la evocación y absolutamente eficaces en la descripción.

Con una cuidada prosa, cómplice del protagonista cuya vida se narra en unas pocas pero inmensas páginas, que permiten al lector a alcanzar una percepción cabal, tanto de los azares de su biografía como de su impulso creativo.

Hierro, uno de los más grandes poetas españoles del siglo pasado, que murió recién nacido el nuevo, merecía un libro como este, porque consigue abrir el apetito por releer sus versos, volver a sentir el tacto de las páginas de sus libros, dejar vagar al pensamiento y las emociones con su personalísimo universo creativo.

No hay mejor homenaje para un poeta que reivindicar su obra, y este libro lo consigue con creces. Es uno de esos libros que uno quiere que le acompañe toda su vida, atesorarlo escondido entre esas obras que no se pueden ni se quieren olvidar. Releerlo cada cierto tiempo, como un ejercicio moral, intelectual, de memoria y de reencuentro.

Es la gran virtud de la literatura que no sabe envejecer, su calidad permite atravesar las oleadas del tiempo sin verse afectada por las modas o el olvido de una sociedad cada vez más apresurada; esa obra que Hierro moldeó, elaboró, escribió, comunicó, mientras vivía como podía y también como quería cuando le dejaron.

Apresúrense a conseguir esta joya, esta pieza única de orfebrería narrativa e ilustrada, porque es un lujo al alcance de todos.

Jorge Riet