Érase una vez un corazón roto

Opinión:

"Érase una vez un corazón roto" es la nueva novela de Stephanie Garber tras la trilogía Caraval, con la que tiene bastante en común, ya que se trata de una derivación (spin-off), donde aparece un personaje ya conocido, el Príncipe de Corazones, que tendrá un papel bastante importante en la trama, casi de protagonista, aunque su rol en esta historia es más de darle la réplica a Evangeline, ya que es ella la verdadera protagonista.

En la sinopsis no es que se mencione nada al respecto, pero esta novela es el principio de una serie, algo sobre lo que no hay ninguna información relevante, de manera previa, que advierta de la situación, que es algo que empieza a plantearse el lector cuando observa que, conforme se va acercando al final, todavía hay demasiadas cosas en el aire y no parece que haya espacio suficiente para que se solucionen.

Lo peor llega en las dos últimas páginas, pues la historia queda totalmente en suspenso, o sea, que se trata de un cliffhanger en toda regla, lo que puede causar una cierta decepción, por lo inesperado que resultaba cuando se empezó la lectura, que ahora se quedará colgada hasta una nueva entrega, pero que tardará en llegar, porque el título siguiente aún está por publicarse en Estados Unidos.

En lo que respecta a esta historia, la trama se inicia en Valenda, que es la ciudad donde finalizó la trilogía Caraval, con los problemas de Evangeline, que ha perdido a su amor y quiere evitar la boda entre Marisol, su hermanastra, y Luc, su hasta ahora novio, como sea, incluso recurriendo a un trato con el Príncipe de Corazones, un Destino, sin que le importe la contrapartida que tendrá que pagar.

Tras algunas peripecias, Evangeline llegará a Glorioso Norte, lugar en el que transcurrirá el resto de esta entrega, entre hechizos, maldiciones y pócimas, y donde se verá envuelta en intrigas, de las que no siempre saldrá bien librada, además de que tendrá que ir pagando su deuda con el Príncipe de Corazones, quien tiene sus propios planes respecto de Evangeline, ya que podría serle muy útil para conseguir algo que ansía.

Mientras sigue la historia, van apareciendo una especie de notas de sociedad, producto de la fértil imaginación de un periodista que está al tanto de todos los rumores que se cuecen allá donde esté Evangeline. Son como unos pequeños incisos y también una forma de presentar a otros personajes que andan por allí.

Incluso en esas notas tiende a aparecer mencionada Evangeline, que es el foco de la acción de la novela en todo momento, dejando en un segundo nivel al resto de personajes, que llegan a eclipsarse por simple comparación con ella.

Sea como sea, "Érase una vez un corazón roto" es una novela que les resultará más interesante a quienes hayan seguido la trilogía de Caraval, aunque no es necesario haberla leído para comprender lo que ocurre en esta, lo que no obsta para que haya aspectos que se queden algo nebulosos.

Selin