el subdito

Opinión:

Hay libros que, en algún momento, recobran actualidad a pesar de haber sido escritos para una época y un país determinado. Este es, en mi opinión, el caso de la magnífica novela el súbito, que fue escrita nada menos que en 1907.

Sin embargo, a medida que se avanza en su lectura, se nota claramente que el tema que se aborda es permanente. Dijo Bertold Brecht de ella que era la primera gran sátira política alemana, y añadiría yo que es la sátira aplicable a todas las sociedades occidentales y sus carcomidas democracias parlamentarias. La novela no es, en absoluto un ataque a la democracia como tal sistema, sino precisamente a los fallos y corrupciones que hacen que se vuelva totalmente ineficaz. En este sentido todos los protagonistas del libro, que de alguna manera representan a la mayoría de los grandes partidos occidentales, como son los nacionalistas, socialistas, liberales etc., salen muy mal parados.

Y, sí se profundiza más allá de lo que es esa gran crítica política, se ve un libro ciertamente profético. Como ya he dicho, la novela fue escrita en 1907, es decir 25 años antes del ascenso de Hitler al poder y sin embargo Hessling, el protagonista, es un Hitler perfecto. Mediocre, sin el más mínimo escrúpulo, de escasa formación, populista, exaltado, manipulador y oportunista. Pero sobre todo es afortunado. Es la personificación de Führer. Hay momentos de la novela que son verdaderamente gloriosos, sobre todo cuando algunos de los personajes “amables”, como el viejo Herr Buck se ponen a filosofar sobre el valor de la auténtica democracia y demuestran que, pese a la degradación general, merece la pena seguir luchando, merece la pena hacer el esfuerzo por mejorar las cosas.

Al día de hoy, y dadas las circunstancias, muchos tendrían que tener esta novela como libro de cabecera y darse cuanta de las consecuencias fatales las que llevan la actitud de los personajes de El súbdito. Libro especialmente recomendable para el líder mundial José María Aznar y su protector George W. Bush.