dios los cría... y ellos hablan de sexo, drogas, españa, corrupción...

Opinión:

Cuando comencé la lectura de este libro tenía la absoluta certeza de que pasaría un buen rato, leería cosas ciertamente sorprendentes, y recibiría opiniones sensatas y maduras.

La obra, que es muy sencilla pues se trata de la transcripción de unas conversaciones, no defraudará en absoluto a quien tenga la suerte de leerla, pues lo que podemos encontrar es a ambos autores en estado puro, y ellos ciertamente nunca defraudan.

Se pueden leer verdades como puños, puños encima de la mesa analizando la realidad, y en suma la realidad vista a los ojos de dos seres ciertamente inteligentes. Son tan interesantes las conversaciones que lo que me apetecería en algunos momentos es poder introducirme en las mismas y plantearle cuestiones a ambos autores.

Conocía a Sánchez Dragó pero no por la lectura de sus libros (mal que le pese) sino principalmente por sus interesantísimos programas de televisión, en especial su añorado “Negro sobre blanco“, donde uno era capaz de encontrar cualquier cosa en relación al mundo no solo de la Literatura, sino de la Cultura en general. No obstante y aunque mucho de lo contado es lo esperado, pues he tenido oportunidad de escuchar anteriormente sus opiniones, o ver entrevistas, el libro nos mostrará una faceta algo oculta del mismo; conocía su atracción por las mujeres en general (jóvenes en particular), pero las historias personales que cuenta son ciertamente increíbles, y algunas veces cuesta trabajo asimilarlas e incluso pueden herir la sensibilidad de lectores sensibles.

Albert Boadella me era ciertamente desconocido, pues tan solo había podido ver en alguna ocasión retazos de alguna obra; debido a su fama polémica y a su manera de manifestarse, siempre digo de él que cuando le obligaban a hablar en castellano quería hablar en catalán, y ahora que en cierta medida le obligan a hablar en catalán, quiere hacerlo en castellano. Me sorprende ciertamente que en cuestión de valores y en particular en la visión de la pareja, el controvertido autor sea bastante tradicional, e incluso en algunas cuestiones incluso moderado. Quizás también sea el resultado de dialogar con alguien tan excesivo como Sánchez Dragó.

En una España donde parece que da miedo dar opiniones distintas a la Oficial o a las Oficiales, es un lujo y un placer leer el oasis de estos dos autores que son capaces de decir cualquier cosa sin miedo al que dirán; quizás esto es debido a que en cierta medida están etiquetados como polémicos, y sus dardos no provoquen el daño que harían si no tuvieran esa etiqueta que se les asigna.

Una curiosidad de la obra es que Sánchez Dragó manifiesta que de él se dice que está loco, y precisamente en más de una ocasión yo así lo he pensado.

Como un avance de las perlas que podemos encontrar en el libro, solo ellos dos podían decir cosas como: “Un buen bofetón a tiempo es altamente pedagógico”, “No puede ser igual el voto de todas las personas”, “Yo soy partidario de que todas las drogas se vendan como lechuga” o “Lo cierto es que España es el único país de Europa donde la derecha no existe”.

Sin lugar a dudas aquí se encuentran las reflexiones más interesantes que he leído en mucho tiempo, y aunque había tenido oportunidad de escuchar algunas, es maravilloso tenerlas juntas y por escrito. Habrá que releerlo y enseñarlo a quienes van detrás de la masa graznando y rebuznando.
 
Raúl Borondo García