Cuando seamos sueños de papel

Opinión:

Hay jóvenes escritores a los que no solo se ha de estar atentos por el éxito de sus libros, sino, sobre todo, porque demuestran tener un gran talento a la hora de escribir. Uno de ellos es Pol Ibáñez.

Ya me sorprendió cuando leí su anterior novela, "Volveré a verte", así que, al empezar esta nueva, ya iba sobre seguro, convencida de que no iba a fallarme, como así ha sido.

"Cuando seamos sueños de papel" (me encanta el título que le ha puesto) es una de esas novelas que están en el límite más extremo entre la novela juvenil y la de adultos. Novelas, o historias, que pueden ser leídas tanto por los jóvenes lectores como por los adultos. En ella, Pol Ibáñez  nos habla de Kei y Aidé. Ellos son los protagonistas de esta historia romántica con los libros y la literatura como personajes secundarios.

Pol Ibáñez tiene una gran destreza a la hora de tejer historias. Desde el inicio, logran captar la atención del lector. Sabe cómo darle la dosis justa de intriga, esa que hace que no quieras dejar de leer.  Su forma de narrar es sincera. Quiero decir que es un autor que se abre a sus lectores, que no les oculta nada. Tanto Kei como Aidé son personajes que gustan, no ocurre lo mismo con la amiga de ella. Lo siento, pero el personaje de Amaia se me ha hecho un poco pesado, en ocasiones hasta la he encontrado impertinente, insoportable, es un personaje del que prescindiría por muy amiga que sea de la protagonista.

"Cuando seamos sueños de papel" es una lectura que no solo seduce sino que te hace sentir muchas emociones. A mí, personalmente, me ha encantado. He disfrutado con cada una de las palabras que hay en ella. Comparada con su anterior novela, creo que en esta última se aprecia que Pol Ibáñez  ha alcanzado ya un grado de madurez en su carrera literaria.

Creo que es una novela mejor escrita, desarrollada, con unos personajes muy bien construidos. Todo esto hace que sea una lectura que recomiende mucho.

Ysabel M.