Cuando Dare Devil se llamaba Dan Defensor

Opinión:

Hay nombres que se quedan grabados y no cambian por más que sepas más adelante que el original es otro. A mí me pasa con el que da título a este libro: yo soy de Dan Defensor, que así conocí ese personaje en mis años mozos, allá por finales de los sesenta.

A medida que he avanzado por sus páginas, me daba cuenta de la cantidad de cabeceras que había publicado Vértice, recogidas aquí en una guía exhaustiva, tanto por las diversas colecciones, como por las épocas, puesto que la editorial estuvo activa unos cuantos años y pasó por algunas vicisitudes, que también afectaron a las publicaciones.

He reconocido muchas, incluso varias por la portada, que me he encontrado con que leí ese ejemplar en su día y ya ni me acordaba. Incluso una cabecera me ha recordado mis primeras lecturas, aunque no fue con la reedición de Vértice, sino con la original de Editorial Marco.

Un aspecto muy interesante es que Alfons Moliné también menciona son las modificaciones que sufrieron demasiadas veces los materiales originales, fuesen viñetas, bocadillos o hasta la estructura de los episodios, lo que corrobora mostrando gráficamente alguno de los desaguisados.

Que ahora puedo verlo, pero entonces, como nos pasaría a muchos chavales, ni me preocupaba nada de eso, ya que lo único que queríamos era disfrutar de aquellas fantásticas historias. La verdad es que daba igual, ya que tampoco teníamos medios para hacer comparaciones. Bastante era que tuviésemos los cómics y los tebeos, que iban de mano en mano por todo el barrio hasta que estaban demasiado deteriorados.

Respecto a la estructura del libro en sí, me ha parecido muy acertado seguir un orden cronológico, separando las diferentes etapas de la editorial durante sus veinte años de actividad, desde 1963 hasta 1983.

Aunque la mejor manera de disfrutarlo es recorrer el libro página a página, también hay un listado de las publicaciones año a año en las últimas páginas, donde el lector podrá buscar algún título concreto. Otro detalle es la última foto del libro, con un cariñoso guiño del autor a los cómics de la editorial. Por cierto, me da la sensación de que en una portada de la página 261 se ha colado un intruso.

"Cuando Dare Devil se llamaba Dan Defensor" es una excelente oportunidad de recordar aquellos cómics que llenaron nuestra imaginación con historias muy sugerentes. Un estupendo libro para regalarse, o regalar a otra persona, un poco de nostalgia.

Selin