¡fieras feroces!

Opinión:

Este es un cuento graciosísimo que yo no dudaría ni un segundo en regalar a cualquier niño. El hecho de que la fiera más feroz acabe siendo la madre –una madre enfadada es una fiera feroz ¿no?- tiene hasta lógica para un niño, pero en cualquier caso la intención no es esa: “¡Fieras feroces!” es un cuento para echar unas risitas, sonreír y releer.
 
Juan irá metiendo miedo a cada fiera salvaje que se encuentre, y tanto el texto –los diálogos- como las ilustraciones darán buena fe de lo mucho que se acobardan los animales salvajes ante tamaño descubrimiento. Es inevitable sonreírse y disfrutarlo como si fueras pequeño porque tiene la ternura y la magia de los niños.
 
Un volumen grande, de tapa dura, a todo color, bellamente ilustrado –diría incluso que más realista que la realidad pues los animales con gestos desconfiados mirando de soslayo por si ven a alguna fiera feroz son geniales-, que hará las delicias de cualquier niño o niña por muchas veces que se lo cuentes o se lo lean. 

Mi hija mayor (7 años) ya lo ha adoptado entre sus libros favoritos.
 
Anika Lillo