Yo, robot

Opinión:

Ya conocía de antes las historias de "Yo, robot" y debo decir que ha seleccionado tres de las más interesantes (o, al menos, de las que mejor recordaba, y que más me calaron) de todas las que escribió Isaac Asimov. Todas ellas tienen en común que los robots son protagonistas y que son peculiares por alguna cosa, aunque los relatos no tienen nada que ver ni en lo que narran ni en los escenarios y situaciones que presentan.

La primera historia, "Sentido giratorio" presenta a un robot que, tras recibir la orden de ir a recoger un componente necesario para la supervivencia de dos científicos, se pone a dar vueltas inexplicablemente alrededor del lugar en el que tiene que adquirir los recursos. Respeta mucho la esencia del original, que tiene un componente de peligro (si el robot no reacciona acabarán muriendo) que lo hace bastante emocionante.

"Robbie", la segunda historia, tiene un componente menos tecnológico y más social: trata sobre un robot niñera y cómo la niña a la que cuida se encariña tanto con él que su madre se preocupa por ella y por el qué dirán, de modo que decide deshacerse del robot. No recuerdo que el original acabara así, pero debo decir que me gusta más este final y que me ha parecido mucho más entretenida esta versión de Raúl Cuadrado.

La tercera historia, "Mentiroso", es un mix entre lo tecnológico (un robot que, sin saberse bien por qué, lee la mente a las personas) y lo social (cómo dicha lectura de mente y las reacciones del robot ante dicha lectura hacen que los humanos a su alrededor cambien sus comportamientos). Resulta bastante graciosa y los malentendidos que genera el robot son muy amenos, de modo que también me ha gustado bastante.

Las ilustraciones, por su parte, vintage y con una gama de colores limitada que enfatiza algunos detalles, son de un estilo bastante caricaturesco que pega con el tono desenfadado que ha elegido para los textos Raúl Cuadrado. Debido a todo esto, es una lectura bastante amena, aunque se hace corta.

Déborah F. Muñoz