Una chica desconocida

Opinión:

Esta historia está contada a tres voces: las que pertenecen al matrimonio (Heidi y Chris) cuentan al segundo todo lo que les pasa y lo que leemos es, en realidad, el pasado, pero la narración de Willow (la chica desconocida) pertenece a una conversación-interrogatorio que le hace Louise Flores (Ayudante del Fiscal del Distrito) y cuenta lo que ocurrió desde que quedó huérfana junto a su hermana Lily, hasta el momento de su encarcelación. Los tres cuentan al lector la historia en presente, y sabemos al momento cada cosa que pasa o sienten.

Todos los thrillers tienen un punto de intriga que se precie, o una escena que impacta para engancharte; nada más empezar cuentan algo que te haga seguir con interés ¿Qué habrá pasado? ¿A quién? ¿Por qué? En este caso lees con curiosidad lo que cuentan Heidi y Chris, primero porque Heidi no puede dejar de pensar en la chica que ha visto, y segundo porque a Chris le preocupa esa actitud, pero es una frase de Willow en la página 54, la que ya hace que te enganches irremediablemente. "¿Qué va a pasarle a ella?", pregunta. Se refiere a la señora Wood (Heidi) Y ahí ya te quedas pegado: ¿Por qué tiene que pasarle algo a Heidi?

Durante toda la novela vemos la evolución de un personaje más o menos estable que acaba rodeando y traspasando la locura, un borderline del que no esperas en realidad que termine como termina. Mary Kubica da bastantes pistas de por qué le pasa lo que le pasa, dado que las obsesiones son así y en este personaje está muy marcada su obsesión. La progresión es bastante rápida aunque el personaje trate de disimularlo, pero sobre todo es apabullante al final, cuando todo se va a tomar por saco (cuando la historia ya va a acabar). Un clic en el cerebro que cambia la normalidad por el delirio. Una meta conseguida y una imposibilidad de diferenciar la realidad de la ficción.

Mientras tanto tenemos a una adolescente con un bebé de cuatro meses instalada en un hogar en el que sólo la quiere Heidi; una mirada siempre hosca de Willow que impide que Chris confíe en ella; el temor de que sea una delincuente o algo peor, quizás una asesina; el miedo a que les descubran porque es un delito no denunciar a asuntos sociales que una adolescente vaga sola con un bebé de cuatro meses por las calles; y pistas sobre el pasado de Willow que indican que es imposible que no huyera de algo, que algo terrible debía  haber pasado para vagar por las calles con su bebé.

Esta historia esconde también una pequeña gran historia de amor. O dos, más bien, la que Willow tiene por su hermana, y la que descubre junto a la única persona que la ayuda incondicionalmente -no puedo dar detalles porque puede ser cualquiera y no debo desvelarlo, para que disfrutéis más de la historia-.

Mary Kubica ya tuvo muy buenas críticas con su anterior novela, "Una buena chica" (que por desgracia no tuve la oportunidad de leer), y con "Una chica desconocida" demuestra que es capaz de abducirte con lo que parece una historia muy sencilla pero que esconde secretos monstruosos de los que es imposible alejarse. Siempre quieres saber más y, sobre todo, cómo va a acabar.

Ahora saca al mercado su nueva novela, "No llores", y yo, desde luego, quiero leerla. Vaya que sí. Os recomiendo mucho esta anterior si no la habéis leído porque os va a encantar la trama y la tensión que provoca conforme avanza su lectura. Os animará a leer la siguiente.

Anika Lillo

Foto homenaje: