Una muerte imperceptible

Opinión:

Esta es una de esas reseñas que me resulta difícil escribir porque "Una muerte imperceptible" es una novela que me sugiere más cosas negativas que positivas y eso es algo que no me gusta poner por escrito. No me las doy de experta, soy una simple lectora que escribe su opinión sobre la obra que acaba de leer y todos sabemos que eso es algo muy personal y subjetivo; habrá muchas personas que piensen de forma totalmente diferente, es parte del juego y, como decía mi madre, para los gustos se han hecho los colores.

Lene Kaaberbol y Agnete Friis provienen del mundo de la literatura infantil y juvenil; sólo puedo decir que aún no han encontrado la voz para dirigirse a un público adulto de manera convincente. Este pasado literario se puede observar en la construcción de unos personajes estereotipados y, en ocasiones, tan contradictorios que resultan poco creíbles.

Tampoco la forma de construir la trama es demasiado sólida; comienza como una serie de historias paralelas que, como lector, sabes que confluirán en algún punto pero los saltos entre una y otra son demasiado grandes a la vez que los capítulos son, en general, cortos lo que hace que, en ocasiones, te preguntes ¿y esto a qué viene? porque la historia llega a ser difícil de seguir y algunas de las acciones de los personajes son francamente inverosímiles.

Creo que el problema de base es un exceso de ambición. Las escritoras danesas han querido denunciar demasiadas cosas en una misma novela: la situación de la inmigración ilegal, de la etnia gitana, el tráfico de armas, el problema de los residuos nucleares en los países del antiguo bloque soviético, la xenofobia europea, el terrorismo internacional, los problemas para compaginar vida laboral y vida familiar de muchas mujeres, y unos cuantos más.

El resultado es una obra poco creíble y es una pena. Sinceramente creo que si las autoras se hubieran centrado sólo en uno de los temas la novela habría resultado muy diferente y, desde luego, muchísimo más interesante; porque no hay duda de que ambas conocen bien su oficio y podrían haber logrado una obra más conseguida.

El lenguaje es claro, directo y sencillo lo que hace que la obra sea fácil de leer y eso es algo que se agradece porque los nombres daneses, a los que no estoy habituada, me han obligado a volver atrás en la lectura más de una vez para situarme adecuadamente en el discurrir de la historia.

"Una muerte imperceptible" es una obra que se deja leer y, aunque inverosímil, resulta interesante. 

Jaci Alía Arreche