Siéntate bien para sentirte mejor

Opinión:

Voy siempre detrás de algún ejercicio general que me vaya bien, que me haga más elástica, que evite tantos dolores musculares (que los tengo continuamente) y el de espalda ¡ay, el de espalda!

Este "Siéntate bien  para sentirte mejor" es muy completo, no lo voy a negar, pero lo primero que hice con él fue buscar aquello que podía hacer, arreglar o solucionar en mi rutina diaria: estar sentada.

Lo primero que me tocó hacer fue irme a una tienda a comprarme una caja porque el fallo principal estaba ahí: piernas rectas posadas sobre el suelo (como se ve en la portada), y yo soy muy bajita así que llevo años sentándome con las piernas cruzadas. Ahora reposan sobre una caja de madera muy mona de los chinos y no fuerzo la columna vertebral en una postura imposible. Debo advertiros que los primeros días los dolores de espalda eran superiores, al parecer estaba tan viciada mi columna que sentarme bien era muy doloroso. Hoy ya puedo sentarme sin dolor. ¿Quiere decir que este libro es útil? Efectivamente, lo es.

Los ejercicios tipo rotaciones ya los conocía y ya los hacía. Los del suelo todavía estoy por hacerlos, y los estiramientos me han venido súper bien. Algunos ejercicios recuerdo que los hacía durante los embarazos.

Texto e ilustración están en sintonía. Se explican bien y los dibujos se completan con flechas que te ayudan a recordar mejor hacia dónde debe ir la parte del cuerpo que estás reeducando.

Así que, resumiendo, el libro es útil. Confieso que me he saltado parte del texto porque quería ir directa a lo que necesitaba: el ejercicio.

Lo único que no me ha convencido es que es un libro incómodo, o sea que necesitas una buena memoria para recordar los ejercicios porque al estar encuadernado en tapa dura, y ser de esos que se cierran solos, es imposible consultar los dibujos mientras haces ejercicio. Hubiera preferido un libro con espiral aunque costara lo mismo. Por comodidad.

Anika Lillo