Robert Walser. Una biografía literaria

Argumento:

Robert Walser nace el 15 de abril de 1878 en Biel, Suiza. Fue el séptimo de ocho hermanos. Desde bien pequeño añora el cariño y la cercanía de su madre, circunstancia que marcará de manera decisiva su carácter. Ante esta carencia afectiva que él comprende insalvable no tiene más remedio que inventarse aquello que le falta.

Tras la muerte de su padre decide que quiere ser actor porque siente que tiene algo que contarle al mundo. Pero su deseo se verá frustrado y ante ese desencanto decide que llegará a ser escritor.

A lo largo de su vida desempeña los más variados trabajos. Pero más rápido que de trabajo cambia de domicilio. Desde siempre busca en sus largos paseos un refugio, una huida en donde se sienta seguro. Pasear es una constante tanto en su vida como en sus escritos. Un modo más de desaparecer. Parece significativo que "El paseo" sea el título de uno de sus relatos largos, premonitorio del paseo final por la nieve que truncó su existencia.

Desde muy joven empieza a escribir sus primeros relatos y poemas. Se marcha a Berlín. Allí gracias a su hermano se empieza a relacionar con gente del mundo del arte. Establece algunos contactos con diversos editores y consigue publicar tres novelas. Pero tras la muerte de su protectora tiene que regresar a Suiza.

Su carácter especial hace que tenga relaciones algo tormentosas con el mundo editorial vienés.

Robert Walser se sirve de la escritura para esconderse de un mundo que no le gusta. Huye de lo definitivo, como asustado. Y en esa huida elige la provisionalidad y lo efímero de la escritura a lápiz en contraposición con el carácter definitivo de la tinta. Una escritura que poco a poco se irá empequeñeciendo como forma de canalizar su obsesión por desaparecer

Años después, ingresa voluntariamente en el manicomio de Herisau. No volverá a escribir ni una sola línea durante los 23 años que permanece internado hasta que el día de Navidad de 1956 muere de un ataque al corazón en los alrededores del sanatorio mientras daba uno de sus habituales paseos.