mi vida en españa. 1916-1936
Título: mi vida en españa. 1916-1936
Título Original: (mi vida en españa. 1916-1936)
Autor: Carmen de Zulueta
Editorial:
Plataforma
Copyright: 1ª Edición, Enero 2011
ISBN: 9788415115151
Etiquetas:
autobiografía
autobiográfica
autobiográfico
biografía
destierro
exilio
historia de españa
memorias
república española
Argumento:
Son las memorias póstumas de Carmen de Zulueta y abarcan los veinte años que vivió en España, desde su nacimiento en 1916 hasta su partida a Roma, en 1936, para visitar a su padre que ejercía allí el cargo de Embajador de España en la Santa Sede. En Roma les sorprende el inicio de la Guerra Civil viéndose obligados a exiliarse. Carmen ya no volvería a residir de forma permanente en España.
Notas bibliográficas:
Hija del catedrático y periodista Luis de Zulueta y sobrina del político Julián Besteiro, Estudió en la Institución Libre de Enseñanza, en el Instituto-Escuela y en la Universidad de Madrid, licenciándose en Filosofía y Letras y en Lenguas Modernas. En 1936 se exilió a París, desde donde se trasladó a Inglaterra y posteriormente a América viviendo primero en Colombia y Brasil y más tarde en Estados Unidos, donde se estableció de forma definitiva.
Obtuvo una beca para estudiar en la Universidad de Ratcliffe (Harvard) y ejerció como profesora en Massachusetts y Nueva York durante más de veinte años. En 1989 recibió el lazo de dama de Isabel la Católica por su labor cultural en Nueva York.
Es autora de Cien años de educación de la mujer española, La residencia de señoritas, Julián Besteiro. Cartas desde la prisión o La España que pudo ser. Memorias de una institución republicana.
Opinión:
La que escribe es la Carmen que tiene 91 años y vive en Nueva York pero la que habla son la Carmen niña y la adolescente.
Ellas son las que nos explican, con un tono de remembranza nostálgica, las cosas cotidianas que le tocaban vivir. Los largos veraneos, los primeros viajes, los hermanos, la pasión paterna por la lectura y la gran influencia intelectual que tuvo sobre ella.
Describe a su madre como una persona entusiasta con las Misiones Pedagógicas y muy comprometida con ese proyecto. En su casa se reunía lo mejor de la intelectualidad española del momento (Miguel de Unamuno, Eduardo Marquina, María Zambrano, etc.) y aunque los niños (Carmen y hermanos) no participaban directamente, sí que se impregnaban de ese ambiente idealista, intelectual y moderno que se respiraba en durante la II República Española.
Recuerda con cariño a personas, situaciones, compañeros y hasta pequeños objetos como si el hacer eso les rindiera un pequeño y secreto homenaje, y con él, a toda una época feliz que le tocó vivir en sus primeros años de vida. Una felicidad que no siempre tuvo después aunque su carácter optimista la hiciera seguir adelante con vigor y esperanza en las personas y lo que el contacto con estas le aportaba.
La narración, muy bien escrita, mantiene un cierto aire de inocencia (debido a la juventud de la autora en la época que se relata) y la impresión que transmite es la tremenda pasión que sentía por España y lo español, así como una tremenda esperanza en el devenir actual de la cultura de este país después de los grises años de la dictadura.
No podía ser menos proviniendo de una hispanista e intelectual tan relevante como ella, y que fue testigo de excepción de unos años en que en este país se hizo mucho por la culturización a lo largo y ancho de la Península.
Esther Gassol
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