mejor que ficción. crónicas ejemplares

Opinión:

Mejor que ficción recoge veintiún crónicas escritas originalmente en castellano por autores españoles e hispanoamericanos; con esta selección Jorge Carrión pretende mostrarnos la calidad y variedad de las crónicas actuales en nuestra lengua.

En el prólogo Jorge Carrión nos resume los orígenes de la crónica y nos ofrece un breve resumen de los inicios del periodismo. El libro se completa con un diccionario de cronistas hispanoamericanos, la bibliografía consultada y las fuentes utilizadas.

Estas veintiún crónicas son de temática muy variada; son relatos de no ficción de viajes, de denuncia, entrevistas diferentes a las habituales, retratos políticos, etc.

Arenas de Japón de Juan Villoro nos habla de Japón visto a través de los ojos de un mejicano. El rastro de los huesos de Leila Guerreiro nos explica la creación y el trabajo del Equipo Argentino de Arqueología Forense dedicado a la identificación de los restos de los desaparecidos argentinos. En Fitzcarraldo en la meseta Jordi Costa narra cómo el Azor, el yate de Franco, acabó en Burgos y los performances de LuanMart en la misma ciudad. El díler digital de Alberto Fuguet es un retrato de la piratería cinéfila en Chile. El bufón de los velorios de Alberto Salcedo Ramos nos describe un personaje cómico habitual en los entierros de la Costa Caribe de Colombia. La guerra en Estambul de Juan Pablo Meneses narra el atentado de las Torres Gemelas vivido en Estambul. Como perros de Juanita León es un relato sobre los secuestrados por las guerrillas colombianas. Cuando me muera quiero que me toquen cumbia de Cristina Alarcón narra como un delicuente adolescente se convierte en un icono de referencia en los barrios marginales de Buenos Aires. Fantasmas de Tánger de Edgardo Cozarinsky recrea el Tánger del período 1922-1956 como zona internacional y refugio de famosos. Un año en la vida de Haiti de Maye Primera es un relato desgarrador sobre la realidad haitiana antes y después del terremoto  de enero de 2010. En familia (Plaza Djemá el F´Ná) de María Moreno relata un viaje de la autora a Marrakech y su relación con los otros integrantes del tour. El cineasta invisible de Julio Villanueva Chang es un retrato del director de cine aleman Werner Herzog. Entrevista con la nueva especie humana de Juan Gabriel Vásquez describe el ashram de Sri Aurobindo y su ciudad asociada de Auroville. El teatro del crimen de Fabrizio Mejía Madrid es un escalofriante relato de la violencia en Ciudad Juárez. Las amapolas también tienen espinas de Pedro Lemebel narra el violento asesinato de un homosexual. Punta de Sal de Jaime Bedoya relata un viaje en pareja por Perú. Kafkalandia de Rodrigo Fresán es un retrato de la ciudad de Praga siguiendo los pasos de Kafka, Grandes Hits de Guillem Martínez es una reflexión sobre el paso del tiempo. Consejos de un ama inflexible a una discípula turbada de Gabriela Wiener es una entrevista sui generis a Lady Monique de Nemours dómina de BDSM (bondage, disciplina, dominación y sumisión) algo similar pero diferente del sadomasoquismo. Cenando con Nietzsche y Fidel el 12 de enero de 2000 de Edgardo Rodríguez Juliá es un retrato de Fidel Castro y Polo pole, de Zanzíbar a Tanganica de Martín Caparrós es una recreación del viaje y la figura de Stanley en su búsqueda del Doctor Livingstone.

Todas estas crónicas, estos relatos de no ficción, muestran la infinita variedad de recursos narrativos y estilísticos utilizadas por sus autores. Todas ellas son de una calidad literaria incuestionable. Estos escritores, cada uno en su estilo, han decidido dedicar su talento a retratar la realidad que nos rodea, directamente, sin pasar por el filtro de la ficción.

Sin ninguna duda estas crónicas demuestran los que insinúa el título de este volumen: el retrato de la realidad es Mejor que (algunas obras de) ficción. Su lectura es un verdadero lujo.

Jaci Alía Arreche