Los crímenes del parque

Opinión:

El autor nada más empezar nos lleva a un lugar hermoso, planificado para recrearse en él. Pero si algo enseña la vida es que la belleza puede ser engañosa, el mal se encuentra en cualquier parte. Allí un cazador de mujeres espera su momento. Entre espectaculares puestas de sol sentiremos llegar la oscuridad y la maldad. 

Dentro de un entorno real Hugo Andrés Castro relata una historia de novela negra, de ficción que bien podría ser verdadera. La investigación policial comienza pronto centrándose en ese agresor que se comporta de forma extraña en sus ataques. Aquí irán apareciendo más personajes, todos ellos necesarios, con sus miedos y personalidades, aportando más realismo a lo que vamos leyendo.

De repente todo dará un giro inesperado, un asesinato cuyo autor no es el agresor hará que la historia cambie. El violador en sí desaparecerá, ahora nosotros conoceremos a ese nuevo asesino, estaremos allí cuando mate. Sabremos sus motivos, haciendo con ello que no terminemos de odiarlo. Es más, da cierta pena el modo en el que los investigadores se van acercando a su entorno. No estamos ante una novela policíaca de esas que llegas al culpable a base de patear las calles, no, aquí, se usará un método tecnológico moderno que le dio en cierta forma un toque de originalidad a la trama.

Escrita de forma muy sencilla, sin florituras, simplemente contando la historia de unos crímenes. Algunas palabras me parecieron que se repetían con cierta frecuencia, pero no llegan a molestar en la lectura pudiendo ser un tic que el autor le quiso dar al personaje. Entre medio, leeremos algunas escenas de sexo, subidas de tono. No entendí bien el motivo de ellas, no tenían nada que ver con estos asesinatos, aunque es verdad que le dan un toque morboso.

Que Hugo Andrés Castro conozca el entorno natural donde se desarrollan los crímenes, le da una vida inmensa a la novela. Los pilares en que asentarla los tenía perfectamente en en su cabeza, simplemente debía escribirla. Hugo, más allá de unos asesinatos, lo que desea explicarnos es que estos crímenes se desarrollan en un sitio amable, en el cual cualquiera de nosotros pasearía por allí con su familia. Nos invita a plantearnos en qué momento una persona normal, se convierte en un asesino. Sí, todos ante una situación de supervivencia podemos llegar a serlo.

Un final que no esperas cerrará una buena trama.

Violeta Lila