La Tierra hueca

Opinión:

Me he encontrado con una novela donde prima sobremanera la imaginación por encima de la trama. Cuesta describir de manera concreta lo que, para aprovecharlo realmente, tiene que sentirse en el interior de cada uno cuando se sumerja en una lectura que se muestra a ratos inquietante, mientras que en otros es francamente sorprendente.

Si ya solamente el concepto de una Tierra hueca resulta complicado de aprehender, qué decir si van paseándose por el libro multitud de gentes, seres extraños, espíritus o, incluso, deidades.

No he intentado comprender en ningún momento lo que iba ocurriendo. Me he conformado con seguir el sinuoso trazado que mostraba Beatriz García Guirado en el recorrido por una jungla viva, conflictiva, rencorosa, hasta violenta con quienes se atreven a hurgar donde no son bienvenidos.

Tampoco sé muy bien dónde hemos acabado al final. ¿Dentro de esa Tierra hueca? ¿Fuera? Da lo mismo, hay veces que el entorno se difumina, se transforma en un algo onírico, que tanto puede ser una imagen agradable, como una pesadilla. En verdad, que lo he visto más veces de esta manera, como una pesadilla que mordía el alma, que masticaba la conciencia.

"La Tierra hueca" es una novela corta en su extensión, profunda en su planteamiento y compleja en su desarrollo. Tanto puede echar para atrás al lector, como atraparlo en una telaraña pegajosa y asfixiante.

Selin