La suerte de los irlandeses (Serie Pat MacMillan 1)

Opinión:

Este libro me lo recomendó encarecidamente un amigo Policía Nacional. Al cabo de una semana ya lo tenía entre mis manos y tras las primeras páginas me di cuenta de que estaba irremediablemente enganchada.

Con un estilo directo, muy visual y cinematográfico, la acción se desarrolla casi en tiempo real, con una trama trepidante, que nos obliga a seguir leyendo para satisfacer la curiosidad que, de forma magistral, el autor ha ido creando. Diría que con su destreza y su experiencia como guionista de Hollywood logra construir una historia adictiva que nos absorbe, como si en lugar de palabras, lo que tenemos ante nuestros ojos fuera una pantalla de cine.

Pat MacMillan, a quien llaman Mac, es uno de los mejores agentes de "La Casa", de una personalidad extraña, con un sentido del humor mordaz y un cinismo que a veces me ha puesto nerviosa, pero que al mismo tiempo es muy auténtico, muy humano, con sus miserias y sus fantasmas a arrastrar. He disfrutado con este protagonista, con sus ironías, sus opiniones, sus diálogos con los demás personajes y sus discursos internos, plagados de referencias televisivas y guiños generacionales. No veo la hora de que se publique la segunda entrega de esta serie, que tal y como ya se adelanta al final del libro, se llamará "Mañana es otro mundo" para seguir leyendo sus nuevas aventuras (*se ha publicado este mismo año, 2015).

De forma paralela a la investigación a contrarreloj de Mac nos encontramos, desde el primer instante, una serie de escenas, narradas en tercera persona, donde vemos a una bella y misteriosa mujer que ejecuta una serie de asesinatos, todos ellos para liquidar a antiguos miembros de ETA. A lo largo de la novela iremos haciendo todo tipo de conjeturas, dudando de cada uno de los personajes y de las situaciones que vemos, y no se resolverá hasta el final, donde las piezas del puzle encajan con maestría, incluso con los más pequeños detalles.

Mac es un solitario, pero en esta novela cuenta con sus dos compañeros, Meg y Chema, con el apoyo de su jefe directo, a quien llaman "El zorro", y con las zancadillas de algún que otro directivo de "La Casa", ya que, a medida que el protagonista avanza en su investigación tras la búsqueda del infiltrado destapará algunas cloacas y se topará con algunas sorpresas que podrían perfectamente estar ocurriendo en el mundo real.

Esta es una novela negra, con un trasfondo de espionaje, pero en el que predomina el suspense, la necesidad de que el protagonista resuelva los enigmas que se le presentan para poder evitar que se lleve a cabo lo que puede ser el atentado más salvaje y de mayor impacto en la historia de España. Como aficionada a este género he disfrutado mucho con los entresijos de las agencias de inteligencia, las envidias, las traiciones, los engaños, las medias verdades y, por supuesto, con el giro final, cargado con unos tintes de venganza, y con el que todas las piezas acabarán teniendo sentido.

Ana Olivia Fiol Mateu