la crítica teatral completa de mariano josé de larra

Opinión:

Como estudiante de Periodismo y amante de Larra desde hace años, no pude resistirme a la tentación de contar con este volumen en mis estanterías y ofrecer una crítica sobre él. Sin embargo, si escribir la crítica de una crítica es tremendamente difícil cuando el crítico es tan excepcionalmente bueno como Larra, hacerlo sobre un estudio en el que los conocimientos de los autores sobrepasan con creces los tuyos es doblemente difícil. Sin embargo, hay que hacerlo. Y empezaremos diciendo que esta edición de la Crítica teatral de Larra aprueba con nota.
 
Por un lado hay que reseñar la labor de documentación simplemente para la recopilación de la crítica, que como estudiosa en distintas bibliotecas sé que no ha sido fácil. A lo largo de los años se han publicado numerosas antologías parciales o pretendidamente totales de las obras de Larra. Pero algo curioso ha ido ocurriendo con el tiempo, y es que en muchas de ellas (en algunos casos incluso en todas) se han cambiado los títulos de los artículos, lo que hace difícil localizar las obras publicadas en los medios en los que se hizo. Sin embargo, Rafael Fuentes sale airoso del trance y nos ofrece una extensa recopilación de los textos críticos clasificados en seis categorías. Y no contento con eso, ofrece la fecha y medio de la publicación original, así como datos de dónde y cómo volvieron a publicarse, si lo fueron, lo que ofrece una maravillosa ayuda para el estudioso.
 
Es en la Introducción, separada también en cuatro apartados, donde la erudición de Fuentes se hace más patente, pero sin resultar recargada. Fuentes arroja al lector un montón de datos y fechas, pero lo hace de manera amena y muy bien ligada, como el que cuenta un cuento. Solo que en este caso el protagonista no matará dragones ni rescatará princesas, sino que revolucionará la crítica teatral para siempre. Otro gran hallazgo que hará las delicias de estudiosos y curiosos.
 
Esta obra es, pues, no sólo una joya por su novedad como recopilación, única hasta ahora. Lo es también desde el punto de vista de los estudiosos, de los investigadores, de los amantes de Larra. Una joya por la que yo habría pagado una fortuna en mis años como universitaria.
 
María Martín