El orfebre

Opinión:

El comienzo nos traslada a Sudáfrica en el año 1966 cuando encontraron el diamante que terminaría conociéndose en todo el mundo con el nombre de Estrella de Sudáfrica. Allí se abriría la gran mina que costaría la vida a demasiados hombres. Es duro imaginar a todos esos trabajadores pobres y miserables tocando con sus propias manos diamantes para que luego terminen siendo poseídos por grandes fortunas.

Todavía faltaban dos años para que nuestro joven protagonista viajara hacia ese lugar.

Escrita en primera persona lo veremos relatando a través de los ojos del personaje percibiendo y sintiendo todo lo que nos vaya narrando. La historia se sitúa en mitad del siglo XIX, en una España que vive los últimos coletazos de la guerra de Cuba mientras hace frente a la declaración de la República y alzamientos carlistas. Ambientada en la sociedad catalana "El orfebre" es ante todo una novela de aventuras de esas de antaño que nos llevará desde la ciudad de Ámsterdam, hasta las minas de Kimberleg o el desierto de Karro. Un mundo tan hermoso como cruel. 

Un joven de diecisiete años algo iluso pero muy decidido que trabaja en el taller de orfebrería de su padre saldrá en la búsqueda del diamante más grande del mundo para conseguir la mano de su amada Isabel. Aquí empezará una travesía increíble por mar, tierra, nieve y desiertos donde conocerá al inhumano marqués de Terrassa, a la encantadora esclava Etweda y al entrañable Siawash.

No tengo ninguna duda que Ramón Campos es un gran contador de historias dejando a los personajes llevar su propio compás porque no vi nada que me pareciera forzado, encontré una muy buena armonía entre lo narrado y los diálogos. En un ritmo delirante de no más de cuatro páginas por capítulo nos va acercando a ese minucioso oficio de orfebre junto al de las piedras preciosas. Destacar también el gran trabajo de documentación del que aprenderemos cómo se talla un diamante o diferenciar uno falso del verdadero. Aventuras y desventuras en busca de un sueño al igual que hacían los antiguos aventureros, adentrándose en lugares desconocidos para muchos humanos.

Hoy en día se escriben pocos libros de epopeyas viajeras, lo encontré muy diferente a lo que he estado leyendo hasta hora. Una novela adictiva que te tiene pendiente en todo momento si el protagonista lograra completar su búsqueda. Pero también nos hace reflexionar sobre lo diferente que son las vidas dependiendo del lado en que te encuentras.

"La palabra diamante proviene de la palabra griega adamas. Significa "invencible".

Es verdad que para la juventud del protagonista deberá superar unas pruebas bastante complicadas, pero yo en si no le di ninguna importancia, la novela se escribió para entretener y la función la cumple.

Estoy segura que lo vais a disfrutar y a sufrir a partes iguales, pero ante todo quiero que entendáis que el fondo es una historia de amor, pero sobre todo de crecimiento personal y valor.

Lo verdaderamente importante es que comprendamos que lo que deseamos de verdad nunca se encuentra demasiado lejos, simplemente debemos verlo y apreciarlo.

Violeta Lila.