el jabeque murciano
Título: el jabeque murciano
Título Original: (el jabeque murciano, 2011)
Autor: Luis Delgado Bañón
Editorial:
Noray
Copyright: 1ª Edición, Octubre 2011
ISBN: 9788474862348
Etiquetas:
autores
barcos
ciclo
escritores
españoles
hispanos
historia naval
histórica
literatura española
literatura hispana
marítimo
militar
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trilogías
Argumento:
Cuarta entrega de la Saga Marinera Española, el libro que tenemos entre manos continúa las aventuras del protagonista, Francisco Leñanza, Gigante, y de su amigo y ahora cuñado Santiago Cisneros, Pecas. El autor nos narra cómo el alférez de navío Francisco Leñanza, tras una lenta recuperación de sus heridas tras el combate de las flotantes, –narradas en La Flotante San Cristóbal, el tomo anterior- se incorpora al servicio activo: las operaciones de Argel, en el verano de 1784, donde una escuadra compuesta por españoles, portugueses, malteses e italianos y comandada de nuevo por el general Barceló, se dirige a la costa argelina para impartir un castigo por el continuo acoso de los piratas sometían a nuestras naves en el Mediterráneo. En la división de jabeques, dirigida por D. Federico de Gravina y Napoli, servirá Francisco, agregándose al combate su cuñado Santiago, proveniente de Turquía, donde ha estado en misión de paz.
El autor, Luis Delgado Bañón (Murcia, 1946), capitán de navío, escritor, director -hasta hace muy poco- del Museo Naval de Cartagena, es un amante de la historia, sobre todo la historia naval española, a la que ha dedicado años de esfuerzos y de investigación.
Opinión:
Tras una primera parte donde el autor nos pone al día de la situación política, por medio de charlas entre los dos cuñados y diversas explicaciones, en la segunda parte se nos describe ya la formación de combate, los problemas con los vientos adversos, los bombardeos que mantienen durante trece días frente a la fortaleza argelina, con el valiente general Barceló, en primera línea, moviéndose con su falúa entre las “cucarachas” (cañoneras y bombarderas) impartiendo órdenes constantemente a diestro y siniestro, babor y estribor, e incluso sufriendo un chapuzón; finalmente, tras haber cumplido la misión, el tornaviaje.
En toda esta parte, hay un personaje que comparte la acción con Francisco: el caballero aventurero D. Alvaro de Galdomar, que le cuenta su historia personal y la razón por la cual está entre la tripulación. Las aventuras que siguen, -porque el retorno se complica- hacen de estas últimas páginas las más emocionantes del libro, con descomunal tormenta, cruenta batalla y tensión por los cuatro costados. Se acaba con retorno a Cartagena, entre vientos y calmas, y un feliz acontecimiento.
En suma, una novela algo descompensada entre las dos partes. La primera, más lenta, a pesar de que sea la que nos sitúe en las coordenadas históricas y el estado de la Real Armada y del país en esos años; y la segunda, que es mucho más atractiva por la acción y la trama, siempre necesarias en este tipo de literatura donde la aventura es imprescindible. La edición incluye entre las ilustraciones, un mapa de los movimientos de barcos, una imagen de un jabeque con detalles y nombres, y otra imagen del general Barceló.
Ariodante
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