El abogado de pobres. Saga Pedro de Alemán 1

Opinión:

Desde la primera página pareciese que has saltado en el tiempo hasta el siglo XVIII. Juan Pedro Cosano ha cuidado el ambiente descendiendo al mínimo detalle para que no faltase nada en la imagen que formemos en nuestro interior. No es ya solamente la descripción de las calles, identificadas mientras son transitadas por los protagonistas, las notorias diferencias al presentar a cada personaje con las características de su nivel social, las propias circunstancias de la vida de cada cual o las diferentes monedas que circulan de mano en mano.

Es también el lenguaje que, dentro de un español fácilmente comprensible, recrea a menudo las floridas maneras de comunicarse propias de la época, sin que en ningún momento se haga pesado; al contrario, la sorpresa inicial se convierte en cómplice participación en una historia muy bien hilvanada y que nos hace revivir un tiempo pretérito.

Siendo el tema principal la abogacía, asistiremos a las pesquisas pertinentes y a los posteriores juicios, donde no siempre ganará nuestro protagonista, que eso es lo más normal, ni tampoco la justicia, aunque esto último no es algo que, por desgracia, sorprenda demasiado, claro que justo ese aspecto es el que da más realce a la novela, al no caer en la peligrosa autocomplacencia.

Aunque cierto es que el protagonista utiliza para bien su perspicacia, aliada con un empeño casi obsesivo, el azar también tiene su parte en unas intrigas que se suceden de continuo y donde el autor apenas deja resquicio para unos momentos harto jocosos y liberadores de la tensión acumulada.

Tras esa ficción histórica, se nos presentan unos personajes que manejan sus vidas como mejor pueden, con todos sus claroscuros, grandes en ocasiones, viles en otras y con la ruindad siempre al acecho. Y tal cual es la vida, habrá quién pene sus acciones, pero también quien disfrute regalías sin, en nuestra consideración, merecerlas.

En verdad que "El abogado de pobres" es una excelente novela que atrapa al lector, sin que para nada sea necesaria la afición por la historia, pues los temas que trata todavía siguen vigentes en la actualidad, y que nos hará sentir tan cercanos los personajes y sus cuitas que llegará a hacerse corta. 

Selin