Carácter

Opinión:

Un hombre, una mujer y su hijo. Son sus padres, pero a pesar de lo que cualquiera pudiera pensar a priori, no forman una familia. Ni siquiera madre e hijo la forma. Katadreuffe y sus padres son tres personajes atormentados e individualistas que transitan por la vida tomando decisiones sin pensar en los demás, como si los destinos de unos no pudieran cruzarse con los de otros. Desde la violación que sufrió Jacoba Katadreuffe por parte del agente judicial Dreverhaven, este le pidió matrimonio en hasta seis ocasiones, a lo cual ella se negó. Su honor la obligaba a criar a su hijo en soledad, donde no pudiera cometer los mismos errores que ella o que su padre, los errores debidos a un carácter solitario e incomprendido.

Sin embargo, el joven Katadreuffe -que lleva el nombre de su madre, pues el padre jamás pudo reconocerlo- cometerá errores. En dos ocasiones, por deudas y una mala gestión de su escaso patrimonio, será conducido a la quiebra por su propio padre. Intentará labrarse primero mediante un quiosco de tabaco, pero la mala ubicación y la falta de clientela lo conducirán tempranamente a la ruina. Pero Katadreuffe, impelido por la voluntad, se esforzará trabajando en una agencia jurídica a la vez que se saca la carrera de abogado, con el objetivo de llevar una vida decente.

El mundo gris que transmiten estos tres personajes es el centro de "Carácter", una novela cuyo título ya refleja el componente intimista y psicológico que comporta la narración. Bordewijk, uno de los autores más importantes de la historia literaria holandesa, escribió esta novela en el primer tercio del siglo XX, cuando la economía fluctuaba en una Europa entre guerras. La novela supone un interesante documento histórico en torno a la época  y a las costumbres, tanto de las clases bajas como de las clases altas, ese mundo que hoy recuperamos en blanco y negro y que el narrador de estas páginas presenta como una realidad de tonos grisáceos. Unos grises que, no obstante, se van colorando poco a poco mediante personajes singulares, como Jan Maan, amigo del protagonista que simpatiza con el comunismo, o la bella señorita Te George, objeto del deseo de Katadreuffe.

"Carácter" es una novela monótona, propia de otra época, que remite a un mundo de clases sociales muy definidas y donde todo estaba regido ya no solo por la división social, sino por un sistema judicial muy estricto. Una novela lenta y de lectura difícil, recomendable sobre todo para nostálgicos.

Darío Luque